Alejandro Gómez

Por su participación, empeño y dedicación al presidir el Patronato Pro-Restauración de la Parroquia de Santa Prisca y San Sebastián de Taxco en 1985, el ex alcalde Mario Flores Pérez recibió de la “Sociedad Mexicana de Arquitectos Restauradores A. C.” (Smar), un diploma-reconocimiento como testimonio de su aportación en las labores de rehabilitación, mantenimiento, limpieza y rescate de varias áreas del templo religioso e ícono del “Pueblo Mágico”.

La agrupación civil fundada en la década de 1980, fue presidida por Flores Pérez a petición del entonces gobernador de Guerrero, José Francisco Ruiz Massieu, y contó con el respaldo de la coordinadora regional del instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en el periodo 1987-1990, Virginia Isack, donde el ex rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), Jaime Castrejón Diez, asumió la coordinación de los trabajos de restauración de la iglesia.

Los trabajos efectuados por el Patronato Pro-Restauración de la Parroquia de Santa Prisca y San Sebastián durante tres años, a cargo del ex presidente municipal de Taxco y decano de los arquitectos del municipio platero y en Guerrero, Mario Flores Pérez, consistieron en la rehabilitación del órgano original de la máxima joya arquitectónica del destino colonial bajo la supervisión del restaurador, Joaquín Wieslosky.

Se efectuó la restauración y recuperación del expositor original del altar mayor del templo, la limpieza y rehabilitación de los altares, así como la impermeabilización de las bóvedas y se realizó el rescate y atención del “túmulo mortuorio” dedicado al minero, don José de la Borda, por haber aportado los recursos económicos para la edificación del recinto católico en el periodo de 1751-1758 en el corazón de Taxco.

De igual manera, el citado patronato bajo la conducción de Flores Pérez en coordinación con el Colegio de Arquitectos, realizó la sustitución de 450 metros cuadrados de losetas de cantera del atrio de la iglesia y encabezaron la donación de la “Casa Humboldt” al pueblo de Taxco, que ahora es conocido como Museo de Arte Sacro Virreinal y se ubica a una distancia cercana de la Parroquia de Santa Prisca y San Sebastián.  

Según los registros las obras de restauración se llevaron a cabo a través de aportaciones económicas voluntarias de los taxqueños y con la contribución del ex rector de la UAGro, Jaime Castrejón Diez, por el orden de los 10 millones de pesos, quien además se hizo cargo del pago del terreno y la construcción del “Museo Guillermo Spratling” en el centro de la ciudad, donde se encuentran las oficinas del INAH. 

Luego de ser reconocido por la Smar por haber encabezado el patronato responsable de la restauración del inmueble religioso, el ex alcalde Mario Flores Pérez se dijo agradecido por la distinción de esa agrupación y la oportunidad de colaborar en los trabajos de conservación de la máxima joya arquitectónica de Taxco, que es símbolo de unidad y patrimonio del destino colonial y de la humanidad.