La tarde de ayer, una pipa de agua se hundió en un socavón que permanecía desde hace ya varios meses sobre la calle principal de la colonia San Rafael Norte, lo que genera que este abarcará mayores dimensiones sobre la vía que conecta a más de 25 colonias del norte de la ciudad, dejando a cientos de familias prácticamente sin acceso.


La caída de la pipa de gran tonelaje, reveló nuevamente la fragilidad del suelo en la zona, afectada por una falla geológica activa que ha avanzado sin control durante los últimos tres años.


Desde hace más de tres años, una serie de socavones y levantamientos de tierra han sido causados por una falla geológica que sigue afectando a más de 30 colonias de la parte alta de la zona norte de esta capital.


Esta situación ha afectado gravemente la infraestructura de las colonias, incluyendo viviendas y edificios, principalmente en las calles Acapulco y la avenida Chilpancingo, donde las casas presentan daños estructurales irreparables.


A pesar del peligro, muchas familias continúan viviendo en sus hogares, algunas ya declarados como inhabitables por Protección Civil, quienes han colocado señalamientos de “zona de alto riesgo” en las paredes de los hogares más afectados.


Pero ante la falta de otro lugar a donde irse, los residentes se ven obligados a seguir habitando sus inmuebles.


“Hemos pedido ayuda a las autoridades, pero no nos ofrecen alternativas, no podemos simplemente abandonar nuestras casas porque no tenemos a dónde ir”, señaló uno de los afectados, que prefirió mantenerse en el anonimato.


Muchas de las familias, que dicho sea de paso, son de bajos recursos, ven día a día, cómo el avance imparable de la falla geológica va destruyendo poco a poco el patrimonio que construyeron durante años.


Por su parte, las autoridades municipales y estatales han emitido dictámenes que confirman el avance continuo de la falla, la cual se originó en el oriente de la ciudad y durante el paso de los años ha alcanzado las viviendas de en la parte alta de la zona norte.


“Es urgente que los gobiernos de los tres niveles coordinen esfuerzos para realizar un estudio a fondo del problema de suelo y busquen una alternativa de solución para las decenas de familias afectadas”, reclamaron.


Finalmente hicieron un llamado a las autoridades de los tres niveles de gobierno para que prioricen la atención a las familias y sus viviendas, que no solo pone en riesgo su patrimonio, sino también la vida de cientos de personas.