Maestros y padres de familia tomaron las instalaciones del Plantel No. 17 del Colegio de Bachilleres (Cobach) en la comunidad de El Ocotito, Guerrero, esto para exigir la reincorporación de tres maestras que fueron separadas de sus funciones sin previo aviso.


Azucena Jiménez Navarrete, quien durante años ha impartido clases de biología y laboratorio en el plantel, es una de las profesoras afectadas y según declaraciones de sus colegas, ha representado al colegio en diversas competencias académicas a nivel nacional, pero, a pesar de su destacado desempeño, fue retirada de sus grupos al inicio del semestre.


En el caso de Magdalena Sánchez Rodríguez, delegada sindical de la Sección 63 del SUSPEG y maestra de Sociología y Administración, se le removieron sus horas de clase sin una explicación clara.


Por su parte, María del Carmen Bello Álvarez, quien cubría la materia de español durante dos años, enfrentó una situación similar a la de las otras dos docentes, por lo que las tres maestras buscaron respaldo en el Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), luego de que el sindicato del Cobach no les brindara el apoyo.


Los manifestantes, informaron que no solo exigen la reincorporación de las docentes, sino también la destitución del director del plantel, Eduardo Alonso Aguirre Rangel.


Ya que los padres de familia lo acusan de encubrir casos de acoso sexual contra alumnas, lo que ha causado la preocupación y el descontento de los padres.


Asimismo, los manifestantes pidieron a las autoridades correspondientes que la subdirectora académica, Nora Luna Blas, se mantenga al margen de las negociaciones, pues consideran que ha sido parte de los problemas que enfrentan.


Finalmente hicieron un llamado a la gobernadora del estado, Evelyn Salgado Pineda, y al secretario de Educación estatal, Marcial Rodríguez Saldaña, para que intervengan y den una pronta solución a este conflicto.


Por su parte, las maestras advirtieron que, si no se toman medidas prontas, el movimiento podría escalar a protestas de mayor magnitud.


El cierre del plantel ha dejado sin clases a más de 400 estudiantes de nivel medio superior, quienes no podrán retomar el ciclo escolar hasta que las autoridades educativas den una solución a este problema.