La suspensión del transporte público por amenazas de grupos delincuenciales se extendió a Ixtapa-Zihuatanejo, uno de los principales destinos turísticos de Guerrero.

Los tres principales destinos turísticos del estado, que integran el Triángulo del Sol, tienen paralizado su sistema de transporte público. En Acapulco, la suspensión inició el pasado 11 de enero y en Taxco, el 12 de enero.

En Ixtapa-Zihuatanejo, solo el 10 por ciento de las 700 unidades de transporte público prestaron servicio este martes, según estimaciones de un conductor de taxi.

El conductor, quien pidió el anonimato, dijo que la suspensión del servicio se debe a amenazas de grupos delictivos.

“No sabemos a qué grupo se le atribuye, pero nos dijeron que si no suspendíamos el servicio, nos iban a hacer daño”, dijo.

La Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz informó que a partir el martes que se reforzó la seguridad en las rutas de mayor demanda de pasaje de Zihuatanejo, con efectivos del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y Policías Estatales.

En Acapulco, el secretario General de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez, estimó que el viernes pasado se tendría funcionando al 100 por ciento las 30 mil unidades del padrón de esta ciudad. Sin embargo, la Guardia Nacional continúa prestando apoyo en el transporte público.

El lunes 22 de enero, un grupo de transportistas realizó una protesta en la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo para demandar que se frenen los operativos y hostigamiento de policías estatales y ministeriales.

Al día siguiente, elementos de la Guardia Nacional, el Ejército Mexicano y la Policía Estatal disiparon un bloqueo que estaba programado para este martes en la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, en la comunidad de San Jeronimito, perteneciente a Petatlán.

La suspensión del transporte público ha afectado a miles de personas en los tres destinos turísticos de Guerrero.