ANA LILIA TORRES

Comerciantes del Mercado Central de Acapulco retuvieron a elementos del Ejército Mexicano, para tratar de evitar que se llevaran detenido a un hombre por portación de arma de fuego.

Durante un recorrido de vigilancia por dicho centro de abasto, los militares habían sorprendido sorprendido a un joven en posesión de arma de fuego y lo detuvieron.

De inmediato, comerciantes salieron a defender al detenido y rodearon las camionetas Hummer en que iban a bordo los soldados, para obstruir su salida del lugar.

Algunas locatarias hicieron una valla humana alrededor de los vehículos militares para impedir que salieran junto con el joven, a quien le habían encontrado un arma 9 milímetros.

Posteriormente, los comerciantes procedieron a bloquear la avenida Adolfo Ruiz Cortines, para presionar a los soldados a liberar al detenido y amenazaban con no retirarse hasta lograr que lo dejaran en libertad.

El hecho provocó una intensa movilización de policías de diversas corporaciones y más militares que llegaban en apoyo; sin embargo, los manifestantes les cerraron el paso con unidades de transporte público.

De acuerdo con la versión de algunos testigos, los vendedores les lanzaron piedras y provocaron a gritos a los militares, para que accedieran a sus presiones.

Los comerciantes mantuvieron retenidos a los militares durante hora y media, mientras familiares del joven llegaron a tratar de negociar su liberación, argumentando que el arma es para su defensa, debido al problema de inseguridad en Acapulco.

Finalmente, la madre del detenido acordó ir con él para presentarlo ante la Fiscalía General del Estado (FGE) a responder por el delito de portación de arma de fuego, razón por la que los comerciantes retiraron el bloqueo y permitieron la salida de los vehículos militares.