- Piden apoyo a las autoridades municipales y estatales para evitar que invasores construyan un mercado para su líder
Gilberto Guzmán
Vecinos de la colonia Rubén Mora de Chilpancingo pidieron a la presidenta municipal, Norma Otilia Hernández Martínez, y a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, su intervención debido a que un grupo de personas han destruido lo que representa un avance de la capilla de Nuestra Señora de Guadalupe, que con esfuerzo han ido construyendo.
Denunciaron que los invasores pretenden construir un mercado particular para su líder y para algunos de sus seguidores.
El grupo de quejosos dijeron que estas personas no tienen ningún pudor ni respeto por las tradiciones católicas, por lo que piden el apoyo al mismo obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, monseñor José de Jesús González Hernández, “para que intervenga e impida que sea destruida la casa de la Virgen de Guadalupe, la madre de todos los mexicanos”.
Acusaron que estas personas están dirigidas por una señora que se llama Sandra, quien está cometiendo actos vandálicos contra la estructura de la capilla, algo que indigna a quienes profesan la fe católica, pues reconocen este espacio como punto de reunión y armonía de los habitantes de la colonia Rubén Mora y de los asentamientos vecinos.
Los molestos vecinos pidieron omitir sus nombres porque dicen que esa señora es muy agresiva y violenta, y porque ignoran quién o quiénes están detrás de ella que se siente poderosa como para realizar estas deplorables acciones.
Dijeron que Sandra y sus seguidores ya han tumbado muros y castillos de la construcción, algo que les resulta deplorable, y que movidos por sus ambiciones personales están construyendo puestos de madera y los espacios los están vendiendo al mejor postor.
Afirmaron los quejosos que Sandra se autonombra como líder priista de varias colonias del rumbo y que presume influencias en el Ayuntamiento y con funcionarios estatales, “por lo que ella puede hacer lo que le venga en gana con la capilla en construcción”.