• El dirigente estatal del Morena condenó la masacre de 20 personas en San Miguel Totolapan e insinúa que en ese municipio había un narco gobierno 

Jesús Saavedra

El gobierno del PRI dejó en Guerrero una “herencia maldita” deviolencia e inseguridad, aseguró el presidente de Morena, Jacinto González Varona, quien afirmó que si los alcaldes de la Tierra Caliente no se hubiesen opuesto a la presencia del Ejército en esa zona, la masacre de 20 personas en San Miguel Totolapan se habría evitado.

Este martes, el dirigente de Morena condenó los hechos de violencia en los que murieron el alcalde perredista, Conrado Mendoza Almeda, su padre Juan Mendoza, y otras 18 personas, entre ellos varios funcionarios del Ayuntamiento de San Miguel Totolapan.

“Lo reprobamos completamente, todo tipo de violencia, es un hecho lamentable e histórico, porque en décadas no se había registrado esta vil masacre, se entiende que ahí no tuvo participación el Estado; es un tema de ajuste de cuentas, quizá, porque primera no gobernamos San Miguel Totolapan, gobernamos el estado y la gobernadora llegó después de los alcaldes”, recordó.

Aseguró que Morena tiene “filtros para evitar que candidatos puestos por el crimen organizado lleguen a ocupar espacios, Morena en Tierra Caliente sólo ganó dos alcaldías y con mujeres, porque no le permitimos al crimen organizado que incida en nuestro partido”.

Enfático señaló que Morena “en todo su esplendor no va a permitir la infiltración del crimen organizado, preferimos no registrar candidatos en esas regiones para evitar que tengamos narcogobiernos en las regiones y estén afectando la gobernabilidad del estado”.

Jacinto González sostuvo que “el tema de la violencia y la inseguridad se debe a las bases que ellos (en el PRI) asentaron, es una herencia y podría decir que es una herencia maldita que nos dejaron, ellos (el PRI) dejaron estas bases que nos dejaron, nosotros estamos deconstruyendo para construir un nuevo sistema político y nueva forma de hacer gobierno en Guerrero”.

Afirmó que es “severamente exagerado” comparar Aguas Blancas, El Charco, con la masacre de San Miguel Totolapan, “está fuera de contexto. “En Aguas Blancas y El Charco participó el Estado, la policía Ministerial, la Policía del Estado, el Ejército manejado desde los poderes del Estado”, precisó.

Señaló que en la masacre de San Miguel Totolapan “se trata de un crimen de la delincuencia organizada, hay momentos que la delincuencia organizada ha rebasado a los gobiernos municipales, a los sistemas de seguridad municipales y por eso hacemos el llamado a que la Guardia Nacional, el Ejército y la Marina siga en labores de Seguridad, porque no tenemos fuerza pública de seguridad que alcance para detener esa ola del crimen organizada que ha crecido tanto, y lo vuelvo a repetir que los gobiernos municipales han sido rebasados, tanto que tiene que entrar la federación”.

El dirigente de Morena recordó que hace unas semanas transportistas de Arcelia —obligados por el crimen organizado, de acuerdo con una declaración del secretario de Seguridad, Evelio Méndez Gómez—, protestaron y bloquearon la carretera federal Iguala-Altamirano para que el Ejército no instalara un campamento en la Tierra Caliente.

Señaló que “en este artero crimen que sucedió en San Miguel Totolapan, si hubieran dejado a las fuerzas de seguridad 15 o días antes en Arcelia, de donde las regresaron, creo que las fuerzas de seguridad federal tienen inteligencia y a lo mejor ya había detectado esa parte (que estaba por registrarse una masacre)”.

Por ello, Jacinto González consideró que “los alcaldes, con pueblos y crimen, no les permitieron el acceso (a las fuerzas de Seguridad federal), porque hay alcaldes que piden el retiro de las fuerzas federales de seguridad”.

Denunció que después de que los gobiernos, federal y estatal, decidieron retirar a los retenes y puestos de seguridad de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) desde la zona rural de Acapulco a la Costa Chica en los límites con Oaxaca, los comunitarios “se orillaron a la zona de los Bienes Comunales de Cacahuatepec y hoy están obligando a que se retire el operativo estatal y federal”.

Indicó que antier hubo una asamblea en los Bienes Comunales para exigir el retiro de esos operativos y aseveró que “son obligados por el crimen que se ha ido replegando en esa parte y están obligando a los pueblos a que se salgan las fuerzas de Seguridad”.

El dirigente de Morena dijo que el “pueblo debe entender que somos más los que deseamos que esta gente salga y que intenta controlar esa zona de Acapulco, hay un efecto cucaracha y se fueron a meter esos Bienes Comunales de Cacahuatepec y viene otra ola de violencia”.

Por otra parte, al referirse a las declaraciones de la alcaldesa de Acapulco, Abelina López Rodríguez, quien admitió que desde la Mesa por la Paz le ordenaron que no hable de la violencia e inseguridadmGonzález Varona dijo que no cree que se “quiera amordazar” a los presidentes municipales, pero consideró que éstos deben tener su propia estrategia para hacer frente a la delincuencia en los municipiosque gobiernan.

Recordó que él fue parte de la Mesa de la Paz en Acapulco, donde la alcaldesa presentó su estrategia y “se le escuchaba, nunca se le dijo que no se hablara de los crímenes y se discutía que algunos medios de comunicación o la oposición maximizaba los crímenes”.

Sobre el anunció que hizo el exgobernador, Héctor Astudillo Flores, de que iniciará un recorrido por Guerrero para convocar a la unidad en el tricolor, señaló que “se está reacomodando con lo poco que le queda, no veo competencia del PRI en el proceso electoral que viene”.

Añadió que “los partidos tienen el derecho y la obligación de regresar con sus militantes y simpatizantes, qué bueno que estén regresando con sus militantes para explicar lo que hicieron y por qué ahora ya les dieron la espalda, que le expliquen a la gente”.