Gilberto Guzmán Refugio
La gobernadora Evelyn Salgado afirmó que conoce la pobreza y la marginación de Guerrero, pero también su enorme potencial, y expresó: “Sin mentir, recuperaremos la confianza de los guerrerenses; sin traicionar, lograremos los consensos para sacar adelante nuestro proyecto; y sin robar, nos va a alcanzar para dar más apoyos, más obras y tener más bienestar en nuestro estado”.
Reiteró que en su gobierno habrá una política de cero tolerancia a la corrupción y el influyentismo, se trate de quien se trate.
“Se acabaron los privilegios, se acabaron los viáticos y el influyentismo. Vamos a trabajar todas y todos con los principios ideológicos de la cuarta transformación; este será un gobierno austero hacia adentro, para ser generoso hacia afuera y darle al pueblo lo que necesita. No puede haber gobierno rico y pueblo pobre. Aquí vamos a trabajar de la mano para sacar adelante a nuestro estado todas y todos”.
Detalló que se reorganizará el presupuesto y pidió el apoyo de las y los diputados locales, senadores y diputados federales, para luchar por los recursos adicionales que Guerrero requiere.
Reafirmó que ya no habrá escoltas ni camionetas blindadas para los servidores públicos, y que el gobierno no será de oficina y escritorio, sino de territorio, escuchando al pueblo que siempre es el mejor asesor y el mejor consejero.
A partir de hoy, subrayó, “¡Gobierno y pueblo somos uno solo!” La gobernadora no será inalcanzable, lejana y ajena a lo que le duele a la gente.
“Apostamos por este gobierno cercano, de puertas abiertas, sensible a los sentimientos y necesidades de la gente”, precisó.
Salgado Pineda retomó su llamado a la reconciliación, la unidad y a la fraternidad, a quitarse las playeras partidistas y ponerse la playera de Guerrero para caminar juntos y juntas en esta ruta de la transformación.