ACAPULCO. — Elementos policiacos de los tres órdenes de gobierno dispersaron, la noche de ayer, a más de 500 personas que se encontraban aglomeradas sin ninguna medida sanitaria en un evento de jaripeo, en Puerto Marqués. 

Lo anterior pese a la tercera ola de contagios de Covid-19.

A eso de las 22:35 horas, una llamada al 911 dio aviso a las autoridades sobre esta fiesta en esa zona.

Personal de la Dirección de Reglamentos y Espectáculos en coordinación con Protección Civil, Bomberos, Guardia Nacional, Policía Municipal, Policía Turística, Policía Estatal, Marina y Ejército, se trasladaron al lugar, en donde encontraron a decenas de personas, con sonido alto y una arena de rodeo, en donde se celebraba una fiesta, pese al peligro del COVID, así que dispersaron a todos los presentes, al parecer más de 500 asistentes, quienes no respetaron las medidas sanitarias.

Dentro de los que estaban allí había niños, los que en este momento se encuentran en mayor peligro de contagio.