• Manifestó que es fundamental que las autoridades gubernamentales, organismos autónomos, sociedad civil y ministros de culto hagan su propia aportación para la construcción de la paz

Ana Lilia Torres

El arzobispo de Acapulco, monseñor Leopoldo González González, pidió por la paz y el cese a la violencia en el país, e hizo un llamado a los guerrerenses a seguir aplicando las medidas sanitarias contra el Covid-19, para no retroceder del semáforo verde.

En su acostumbrado mensaje dominical, el prelado católico expresó que es necesario buscar la paz, porque “ya no queremos más muertes ni sangre derramada, no más desaparecidos ni extorsiones”.

Reflexionó en que “los hechos criminales sufridos últimamente en nuestra patria, hacen de nuevo resonar en nuestra persona ese ‘¡basta ya!’ que en otras ocasiones hemos expresado” y “a las víctimas les expreso que nos duele e indigna lo que sufren, y que nuestra oración les acompaña”.   

Dijo que es fundamental que las autoridades gubernamentales, organismos autónomos, sociedad civil y ministros de culto hagan su propia aportación para la construcción de la paz y garantizar así una sana convivencia entre la población.

Consideró también que es necesario evitar la proliferación de armas, porque esto “no crea un equilibrio de seguridad, sino que siembra más miedo y el terror ejercido sobre las personas más vulnerables contribuye al exilio de poblaciones enteras en busca de una tierra de paz”.

Llamó a todos a ser artesanos de paz y resolver los conflictos por la vía del diálogo.

“Proponemos continuar construyendo a partir de los principios de solidaridad y subsidiariedad, favoreciendo que prevalezca la ayuda mutua, y caminando animados por la confianza recíproca. Este es un reto que hoy la historia nos ofrece”, indicó.

En el tema del Covid-19, el arzobispo González llamó a mantener una actitud responsable ante el semáforo epidemiológico verde en que nos encontramos y que significa riesgo bajo.

“No vayamos a retroceder, porque eso significaría más personas enfermas, más muertes y más familias sufriendo”, exhortó el arzobispo en su mensaje.

Pidió, finalmente, que “sigamos cuidándonos también los que ya hemos sido vacunados, con el uso de cubreboca fuera de casa, la sana distancia, el lavado frecuente de manos, el toser sobre el pañuelo y el estornudo llamado de etiqueta, y acudir al médico si sentimos algún síntoma de esta enfermedad”.