• En todo momento se privilegió que los trabajadores mantuvieran sus espacios laborales
  • La administración pública municipal atraviesa por un déficit financiero que impide dar incrementos y bonos solicitados por los trabajadores del ayuntamiento

“Gobernar con el corazón y con sensibilidad tiene un precio y hoy lo estoy pagando”, comentó el presidente municipal, Antonio Gaspar Beltrán, en su posicionamiento dirigido a la base trabajadora del Ayuntamiento emitido el pasado viernes. 

“Si desde que nosotros llegamos, hubiésemos reducido la nómina como debió ser y quedarse con mil 500 o dos mil trabajadores, seguramente sería otro el escenario que estuviéramos viviendo”, explicó y apuntó que la sensibilidad y el corazón lo obligó y motivó a respetar el espacio laboral de los poco más de 3 mil trabajadores que hay en el ayuntamiento actualmente.

“Debemos ser agradecidos de tener un empleo, que a pesar de estar en pandemia, todos recibieron su quincena de manera puntual”, agregó el alcalde. 

Sin embargo, los trabajadores exigen y se han manifestado bloqueando calles y avenidas, pese a las complicaciones financieras. 

En distintas ocasiones, se les ha hecho la invitación para generar estrategias que incrementen los ingresos del Ayuntamiento y así se puedan cumplir con sus demandas laborales. 

“Preservamos la fuente laboral de los trabajadores y al final ellos son los que están en contra y no permiten que generemos ingresos, es el costo que estoy pagando por haber hecho las cosas de ese modo”, puntualizó Gaspar Beltrán.

Finalmente hizo un llamado a los sindicalizados a trabajar de manera coordinada, con orden y con respeto, no solo por los usuarios del Ayuntamiento, sino por la sociedad en general, que son quienes mayormente se han visto afectados por los bloqueados de calles.