• Monseñor Salvador Rangel reveló que un sacerdote enfermó en Taxco y no encontraban oxígeno para auxiliarlo ni cama de hospital para que lo atendieran

Redacción

El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, pidió a las autoridades coordinarse para que las personas que enferman de COVID-19 puedan acceder a una cama de hospital y a los cuidados médicos que los puedan ayudar a recuperarse de la enfermedad.

En declaraciones que hizo a la agencia API en Chilapa, el prelado reveló qué hay tres sacerdotes contagiados con COVID-19, que van avanzando en su recuperación.

Sin embargo, recordó que hace tres semanas enfermó de coronavirus el padre Paulino en Taxco, pero no encontraban oxígeno para auxiliarlo y tampoco había lugar para atenderlo en ningún hospital en Iguala.

Por esa razón, Rangel Mendoza pidió a las autoridades tomar medidas para que los enfermos sean atendidos en los hospitales.

Añadió que “también los sacerdotes podemos contagiarnos en cualquier momento; acuérdense de mi caso, yo también me contagié de coronavirus, estuve en terapia intensiva en Cuernavaca, pero afortunadamente estoy aquí y es lo que quiero que entienda la gente”.

Sobre la salud de los 3 sacerdotes que están contagios, aseguró que “ahí van avanzando, poquito a poco, están en un aislamiento total y ojalá que pronto puedan andar circulando sin Covid”.

El obispo exhortó a la ciudadanía a no bajar la guardia ante la pandemia e insistió, en la medida de nuestras posibilidades, seguir con las medidas de prevención para que la gente no se contagie.

Por última sobre las medidas que se tomarán en la Semana Santa, Salvador Rangel, señaló que no se cerrarán las Iglesias, pero redoblarán las medidas para evitar los contagios por COVID-19. (Con información de API)