• Abel Barrera criticó que ninguno de los 18 aspirantes a la gubernatura haga pronunciamientos sobre los grandes problemas del estado
  • Alertó que están enfrascados en una lucha intestina que podría ocasionar una implosión en ese partido

Jesús Saavedra

El director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña ‘Tlachinollan’, Abel Barrera Hernández, aseguró que en Guerrero habrá un retroceso si los partidos políticos y sus candidatos —particularmente los de Morena, en donde podría haber una implosión—, no privilegian la agenda social, por encima de sus intereses personales y de grupo, y advirtió que “no porque un partido llegue al poder se hará una transformación, se necesita de tomar la agenda y las causas sociales para hacerlo de manera conjunta”.

El activista participó en un programa de radio que tienen cada miércoles en la radiodifusora ZEZV ‘La Voz de la Montaña’, en el que estuvo acompañado del abogado Vidulfo Rosales Sierra, con quien analizó el 26 informa anual que ‘Tlachinollan’ presentó el pasado lunes.

En un apartado del programa, el antropólogo habló de la visión que tienen sobre la política y el proceso electoral en curso en el que se habrá de elegir al gobernador, diputados locales y federales, así como alcaldes el 6 de junio del próximo año.

Para Barrera Hernández “es sorprendente” que en Morena haya 18 personas que se hayan registrado como aspirantes a la candidatura a gobernador, y lamentó que ninguno de ellos, u otros actores políticos que buscan ser candidatos a la gubernatura, hagan algún pronunciamiento por problemas graves en Guerrero.

“Es sorprendente que no emitan una postura por ejemplo sobre el tema grave de los feminicidios, sobre la reforma en materia de derechos y cultura indígena y afromexicanos, menos de los conflictos agrarios que han dejado muertos y agresiones. No hay candidato que se posicione públicamente al respecto o sobre los daños que ha dejado la pandemia en los pueblos y comunidades más pobres”, afirmó.

Añadió que en Guerrero “hay una agenda de los pueblos separada de los partidos y de los gobernantes; caminamos en vías paralelas porque la sociedad política tiene su agenda, tiene sus recursos, su dinero, sus cargos; y la agenda social de los pueblos que luchan, que resisten como movimiento social, porque sólo no avanzan”.

Dijo que es triste que en México “no se logra conjuntar la agenda social con los partidos, con la clase política; Morena se ha quedado con la alta votación de Andrés Manuel López Obrador y piensa que es suficiente para las transformaciones sociales. No, un partido, ni las instituciones son suficientes para esa transformación sin el ciudadano, sin la lucha social”, explicó.

Barrera Hernández consideró que las verdaderas transformaciones en el país “no vienen de grupos de poder, vienen de las bases sociales y en este momento, en esta coyuntura, Morena no es suficiente, no van a lograr los cambios máxime si son grupos políticos que dicen que harán la transformación, porque hay intereses creados”.

Aseveró que, en cambio, las organizaciones sociales, las comunidades, los organismos independientes de derechos humanos, los colectivos “que estamos en la lucha por una transformación sin buscar un cargo, ahí es donde está la tierra fértil de la transformación y ahí se necesita que los partidos, los funcionarios, candidatos, la clase política, se bajen de su pedestal y hagan un trabajo con los pueblos”.

Respecto a la elección de gobernador, alertó que en Guerrero hay una disputa interna entre los aspirantes de Morena “y tememos que nos empantanemos por las luchas intestinales y haya una implosión en Morena. Va a suceder lo que está pasando en este trienio en el Congreso del Estado, donde son mayoría y se pelean, se disputan el cargo de la coordinación, el presupuesto y no avanzamos. Es el ejemplo claro que nos puede pasar en el próximo sexenio”, alertó.

Afirmó que a pesar de que los diputados de Morena son  mayoría en el Congreso, no se avanzó en temas sustanciales como la reforma en materia indígena “y se enfrascaron en intereses de facciones, hubo cochupos, acuerdos mafiosos; entonces Guerrero va a seguir en el despeñadero y no porque llegue un partido va a llegar la luz. Puede haber una regresión si siguen esos intereses creados y quien pierde es el pueblo”, finalizó.