• * La oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos pidió a las autoridades mexicanas “investigar de forma exhaustiva” el asesinato del comunicador, ocurrido en Iguala, para que “no permanezca en la impunidad”

Jesús Saavedra

La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) condenó este martes los asesinatos del periodista de Iguala, Pablo Morrugares Parraguirre, y del agente de la policía que le fue asignado como escolta.

En un comunicado, recordó que el periodista y su escolta fueron atacados la madrugada del domingo 2 de agosto, en la ciudad de Iguala, “falleciendo a causa de las heridas ocasionadas por los impactos de bala recibidos”.

“El señor Morrugares Parraguirre, quien cubría información relativa a la actividad de grupos criminales en la región de Iguala y realizaba crítica política, disponía desde 2015 de medidas de protección otorgadas por el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, operado por la Secretaría de Gobernación (SEGOB)”, señala.

La ONU-DH recordó que desde 2016 el periodista “estuvo desplazado fuera de Guerrero a causa de otro ataque en contra suya y de su familia, habiendo regresado recientemente. Estas agresiones todavía no han sido esclarecidas”.

Por ello, hizo un llamado a las autoridades “a investigar de forma exhaustiva y de conformidad con los estándares internacionales de debida diligencia, el asesinato del señor Morrugares Parraguirre y de su escolta, de forma que este crimen no permanezca en la impunidad”.

Y considera que para tal fin “es necesario agotar todas las líneas de investigación, considerando entre ellas la posible vinculación de este ataque con la actividad periodística desarrollada por la víctima, así como con las amenazas y agresiones previas recibidas”.

Recuerda que con el crimen de Pablo Morrugares, “al menos 3 periodistas han sido asesinados en México durante 2020, de acuerdo con la información registrada por la ONU-DH. En particular, Guerrero es uno de los estados más peligrosos para ejercer la labor periodística en México”.

La ONU-DH indica que “ha observado varias agresiones contra la prensa, incluidos al menos cinco asesinatos desde 2017. En este contexto, además de la adopción de medidas de protección para las personas periodistas de la región, sería necesario concertar acciones interinstitucionales de prevención que permitan abordar las causas estructurales del riesgo y generar un clima propicio y seguro para el ejercicio periodístico”.

Finalmente, expresa “sus condolencias y solidaridad con la familia, amistades y colegas de Pablo Morrugares Parraguirre y de su escolta”.