- * El abogado de los padres de los 43 estudiantes desaparecidos dijo que Juan Antonio Flores, quien cursa primer año en Ayotzinapa, sufrió fractura de cráneo tras recibir el impacto de una granada de gas lacrimógeno disparada a corta distancia
A pesar de que el domingo difundieron que durante el desalojo policiaco ocurrido en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, habían resultado 3 estudiantes heridos de bala, ayer el abogado de los familiares de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, Vidulfo Rosales Sierra, informó que es un estudiante el que se encuentra grave luego de haber recibido el impacto en la cabeza de un proyectil de gas lacrimógeno.
En declaraciones que hizo a Imagen Radio, en la Ciudad de México, el activista precisó que el normalista herido de gravedad se llama Juan Antonio Flores García, quien actualmente cursa el primer grado en la Normal Rural de Ayotzinapa.
Explicó que el joven sufrió fractura de cráneo por el golpe y fue operado el domingo por la noche para retirar un coágulo y disminuir la inflamación del cerebro, por lo que hay que esperar 72 horas para declarar que se encuentra fuera de peligro.
Rosales Sierra recordó que el domingo, padres de los 43 y normalistas de Ayotzinapa llegaron a la Normal de Mactumatzá, en Chiapas, como parte de sus actividades para exigir justicia por la desaparición de sus compañeros, y que los estudiantes de la normal chiapaneca estaban realizando labores de volanteo en el sitio donde ocurrió el desalojo, pero sin bloquear la vialidad.
Añadió que hasta el lugar llegaron decenas de policía antimotines de la Secretaría de Seguridad de Chiapas, quienes sin motivo comenzaron a dispararles gases lacrimógenos a los jóvenes y a los padres de los 43 que recién habían llegado. “Eran las ocho de la mañana, se disponían almorzar pero sonó la voz de alarma de los estudiantes del lugar, informando que la Policía del Estado estaba en la entrada de la Normal sobre la carretera Chicoasen, en el kilómetro 2”.
Señaló que “los padres de los 43 salieron y se formaron adelante preguntando a los policías a qué se debía su presencia en ese lugar, pues lo único que se haría eran reuniones con estudiantes y organizaciones”.
Relató que la respuesta de los uniformados fue disparar bombas de gas lacrimógeno. “Un policía a un una distancia aproximada de un metro disparó un escopetín, el proyectil impactó de lleno en el cráneo de Juan Antonio”, quien se desvaneció al instante y desde entonces no ha recuperado el conocimiento.
Rosales Sierra dijo que los normalistas de Mactumatzá son víctimas de persecución por parte del gobierno de Rutilio Escandón, quien llegó al cargo postulado por Morena, ya que no es la primera vez que los desaloja con el uso de la fuerza pública.