• * La alcaldesa de Acapulco dijo que desaparecerán 265 espacios en la administración municipal, como jefaturas, direcciones y subsecretarías, pero es un proceso que “no es de hoy o mañana”

Ana Lilia Torres

ACAPULCO.— La presidenta municipal Adela Román Ocampo afirmó que los trabajadores que tengan que dar de baja como parte del proceso de reingeniería administrativa que iniciará el Ayuntamiento de Acapulco, serán liquidados conforme a la ley y con pleno respeto a sus derechos laborales.

Entrevistada al término de la presentación del proyecto de remodelación del Parque Papagayo por parte del titular de la Sedatu, Román Meyer Falcón, la alcaldesa dijo que desaparecerán 265 espacios, como jefaturas, direcciones y subsecretarías.

Señaló que el proyecto de reingeniería administrativa llevó varios meses y fue presentado de manera privada ante las diferentes fracciones del Cabildo para que hicieran sus propuestas antes de hacerlo público.

“Entonces en eso estamos, pero de repente se tergiversa la información, se crea incertidumbre en la clase trabajadora. En este momento todo mundo cuida su chamba y eso es lo que yo quisiera, que la cuidaran con trabajo los trabajadores”, señaló.

Indicó que la reingeniería administrativa abarcará la supresión de varias áreas y también habrá algunos reacomodos dentro del Ayuntamiento de Acapulco.

“Pero una cosa es que presentes una reingeniería administrativa y otra que ya saques a los trabajadores, se necesita dinero, tenemos que liquidar a los trabajadores que se vayan”, dijo la alcaldesa.

Lo más urgente ahorita es liquidar a trabajadores basificados de mayor edad que están enfermos y jubilarlos, para dar paso a la reingeniería administrativa.

“Esto no es de hoy o mañana, esto requiere dinero. Esta es una propuesta que estamos haciendo, no es botar a la gente sin respeto a su dignidad humana, sin respeto a sus derechos laborales, eso no es así”, resaltó Adela Román Ocampo.

La alcaldesa dijo que no merece el Ayuntamiento de Acapulco mantener una nómina de 120 millones de pesos mensuales, una de las más altas del país.

Del número de trabajadores que serán dados de baja, señaló que “se van a ir los que se tengan que ir, porque estamos hablando de jefaturas, direcciones y subsecretarías que no tienen razón de ser. Para mí, si se fueran 3 mil 500 trabajadores, sería ideal para trabajar solamente con la gente que necesitamos, pero no es así”, dijo.

Manifestó finalmente que tiene el compromiso del gobierno federal para apoyar al municipio con recursos para resolver el tema de las liquidaciones.