* Organización de católicos expresó su rechazo a que el Congreso apruebe la iniciativa propuesta por Morena para que se legalicen esas uniones, porque se allana el camino a que esas parejas puedan adoptar niños
Carlos Navarrete
Integrantes del Frente Nacional por la Familia protestaron ayer en el zócalo de Chilpancingo para exigir al Congreso del Estado que no apruebe la iniciativa de reforma impulsada por un diputado de Morena, con la que plantea reconocer jurídicamente los matrimonios entre personas del mismo sexo.
La manifestación comenzó poco antes del mediodía entre el kiosco del zócalo y la catedral de La Asunción de María, donde miembros de grupos católicos lanzaban consignas en contra de Morena y de la llamada Cuarta Transformación, afirmando que pretenden afectar a la institución de la familia.
“Morena escucha, la familia en pie de lucha”, “Moisés escucha, la familia en pie de lucha”, “Guerrero necesita iniciativas justas, no reformas que a ellos les gustan”, “Escucha a la familia, diputado local, si quieres nuestro voto para la federal”, eran algunas de esas consignas.
En noviembre del año pasado el diputado de Morena, Moisés Reyes Sandoval, presentó una iniciativa de reforma al Código Civil del Estado para modificar la redacción de cinco artículos, de tal forma que el matrimonio no se restrinja a un vínculo entre hombre y mujer, sino entre dos personas, sin distinguir género o preferencias sexuales.
La iniciativa generó inconformidades entre la comunidad católica del estado, que esta semana ha emprendido una serie de actividades para presionar al Congreso local a que dictamine en contra la propuesta, pues afirman que podría ser la antesala para que miembros de la comunidad LGTB accedan a la adopción de hijos.
Los opositores de la iniciativa aseguraron que reconocen los derechos de las personas homosexuales, pero que las uniones del mismo sexo no se pueden equiparar con el matrimonio porque éste corresponde exclusivamente a un hombre y una mujer.
“El matrimonio formado por un hombre y una mujer es la única institución que puede estar abierta a la vida para constituir lazos consanguíneos entre las generaciones. Este referente constituye a la institución matrimonial en un bien público que debe ser protegido y regulado por el Estado, ya que la sociedad se nutre de los hijos concebidos y nacidos de la unión complementaria de una mujer con un hombre”, se lee en un comunicado que repartieron entre los ciudadanos que pasaban por el zócalo.
En el documento afirmaron que la familia es la institución “más valorada y apreciada” por los mexicanos y los guerrerenses, pues representa el futuro de la sociedad, por ello consideraron que los poderes públicos tienen la responsabilidad de protegerla, fortalecerla y vincularla al desarrollo y progreso de la sociedad.
Advirtieron que de aprobarse la iniciativa se vulneraría el derecho de los niños a tener un padre y una madre; además de que a los niños adoptados por parejas homosexuales no se les respetaría su identidad masculina o femenina, lo que los llevaría a un estado de vulnerabilidad.
“En el sistema educativo desde la educación básica, los niños serán instruidos y educados en el tema de la sexualidad y del matrimonio con la visión de esta iniciativa, donde los alumnos aprenderán que es normal tener u n novio o una novia, ser heterosexual o ser homosexual, vestirse de niña o de niño, practicar sexo vaginal o anal, casarse con un hombre o una mujer”, alertaron.
Afirmaron que esas prácticas debilitarán, socavarán y destruirán el matrimonio y la familia, por lo que llamaron al Congreso a que no se reforme el Código Civil. Durante la protesta adelantaron que recolectarán firmas de apoyo para presentarlas ante el Legislativo.