* El presidente se comprometió a acabar con los contrastes que existen entre el Acapulco de esplendor turístico, y el de los pobres y con marcada desigualdad social

* Durante el evento realizado en Ciudad Renacimiento, agradeció “la colaboración del gobernador” Héctor Astudillo, y reconoció que “se ha portado a la altura de las circunstancias” para trabajar “por el bien del pueblo de Guerrero”

Ana Lilia Torres

ACAPULCO.— En su cuarta visita a Guerrero, el presidente Andrés Manuel López Obrador puso en marcha en este puerto el programa de obras de mejoramiento urbano que tendrá una inversión de 600 millones de pesos, para llevar a cabo 4 mil acciones en 26 colonias ubicadas en dos de los 11 polígonos de mayor índice de pobreza y violencia de este municipio.
El mandatario nacional ofreció acabar con los contrastes que existen entre el Acapulco de esplendor turístico, y el de los pobres y con marcada desigualdad social.
En el polideportivo ‘Jorge Campos’ de Ciudad Renacimiento, una de las colonias ubicada en la zona más violenta y marginada de Acapulco, el jefe del Ejecutivo federal hizo un llamado a los 10 mil asistentes al evento a no pelearse y trabajar unidos para sacar de la pobreza al país y acabar con la corrupción y la impunidad.
Reconoció que son muchos los problemas de México, pero que cumplirá todos los compromisos hechos y garantizó una vez más que “no le vamos a fallar, vamos a estar altura de ustedes”, aunque minutos antes responsables de estancias infantiles que dejaron de recibir subsidio federal le reclamaron con gritos afuera del aeropuerto: “Andrés nos fallaste”.
A los maestros les dijo que no tengan duda que se va a cancelar la reforma educativa para acabar la persecución contra el magisterio y refrendó que nunca dará orden al Ejército o Marina para reprimir al pueblo, además de que regularizará a maestros y trabajadores de salud de manera paulatina en su sexenio.
En el acto masivo, el presidente López Obrador estuvo acompañado en el presídium por el gobernador Héctor Astudillo Flores; Román Guillermo Meyer Falcón, titular de Sedatu; la presidenta municipal, Adela Román Ocampo, y el senador Félix Salgado Macedonio.
Afuera hubo protestas de grupos de personas con discapacidad, educadoras y representantes de estancias infantiles que reclamaban al presidente por recorte de presupuesto.
En su mensaje de bienvenida, el gobernador Héctor Astudillo destacó que es la cuarta vez que el presidente está en Guerrero por cuarta ocasión y viene a anunciar un programa de mejoramiento urbano.
“Hoy está en Acapulco para anunciar un programa muy importante, que es el programa de mejoramiento urbano, que va atender muchas colonias de Acapulco y que consiste en apoyos a la vivienda, regularización de la tenencia de la tierra, agua, drenaje y pavimentación; rescate y rehabilitación de espacios públicos, mercados, unidades deportivas y escuelas”, señaló.
El presidente de la República anunció que el programa que vino a poner en marcha consiste en 14 mil acciones, entre las que destacó obras de agua potable, seguridad jurídica en la tenencia de la tierra, mejoramiento de calles, vivienda, escuelas y espacios públicos.
Este programa tiene la intención de mejorar las condiciones de vida de las familias de las colonias olvidadas por anteriores administraciones y “lo que queremos es que no haya contrastes en Acapulco, el Acapulco de los turistas y el Acapulco de los pobres, no queremos eso, eso no es justicia”.
Es importante, dijo, cuidar la actividad turística porque genera divisas y trabajo, pero al mismo tiempo hay que evitar los contrastes y por ello su gobierno hará una inversión de 600 millones de pesos y para el año próximo otros 600 millones de pesos.
“Vamos a ayudar mucho, vamos a atender a todos, pero le vamos a dar preferencia a la gente humilde, primero los pobres. Vamos a aplicar programas de bienestar como nunca se había visto en el país, con una inversión de 300 mil millones de pesos, para entregar de manera directa a los beneficiarios, adultos mayores, discapacidad, estudiantes, artesanos y comerciantes”, afirmó.
Para ello, señaló que ya tiene la fórmula para contar con los recursos necesarios y que “se va a acabar, más bien dicho ya se acabó la corrupción ya no se van a clavar el presupuesto. Se van a acabar la impunidad y la corrupción, me canso ganso”.
Entre los apoyos de programas sociales de su gobierno para Guerrero anunció que 50 mil adultos mayores recibirán 2 mil 550 pesos, las personas con discapacidad tendrán pensión y habrá apoyo con becas para estudiantes de escasos recursos económicos de mil 600 pesos y empleo para 10 mil jóvenes, para que no tomen camino de conductas antisociales, además de créditos sin intereses para comerciantes y productores.
El presidente dijo que anteriores gobiernos no llevaban a cabo los programas y pido a coordinadores que se pongan las pilas a trabajar para aplicar estos programas, además confirmó que vendrá al tianguis turístico 7 de abril y a Ciudad Renacimiento dentro de tres meses a supervisar el programa.

PORRAS PARA ASTUDILLO Y ABUCHEOS PARA ADELA

A diferencia de lo ocurrido en la visita de López Obrador a Tlapa, en enero pasado, está vez no hubo abucheos sino porras para el gobernador Héctor Astudillo.
En cambio, durante todo el acto, grupos de ciudadanos abuchearon a la alcaldesa Adela Román frente al presidente de la República, quien al final de su discurso pidió que la vitorearan al unísono, pero la respuesta fueron gritos en contra de la alcaldesa.
El mandatario nacional reconoció que el gobernador Héctor Astudillo ha trabajado coordinadamente con él por el bien de Guerrero.
“Estamos trabajando en unidad. No conviene pelearnos tenemos que unirnos. Quiero agradecer la colaboración del gobernador, se ha portado a la altura de las circunstancias trabajando en coordinación por el bien del pueblo de Guerrero”.
Ante los gritos contra Adela Román, López Obrador dijo que “somos libres para manifestamos, pero si tenemos ganas de pelear hay que pelearse con los de arriba y hay que pegarle a la corrupción e impunidad”.
Luego les pidió corear el nombre de Adela “todos juntos”, pero los asistentes siguieron con los abucheos hasta que el mandatario salió de Renacimiento.