* Representantes de los refugiados en Chichihualco desde hace 3 meses advirtieron que la próxima semana irán a la Ciudad de México y se plantarán afuera de Palacio Nacional para pedir una audiencia con el presidente
JESÚS SAAVEDRA
Representantes de familias desplazadas por la violencia en el municipio de Leonardo Bravo, tomaron este sábado durante varias horas la caseta de peaje de Palo Blanco, en la Autopista del Sol, para obtener recursos a fin de trasladarse a la Ciudad de México, donde buscarán plantearle su situación al presidente Andrés Manuel López Obrador y éste les resuelva que puedan regresar a sus hogares.
Antes de las 9 de la mañana de este sábado, unos cien desplazados llegaron a la caseta de Palo Blanco y tomaron esa garita de cobro, donde entregaron volantes a los automovilistas a quienes les pedían una cooperación de 50 pesos para transitar por esa vía de comunicación.
En el volante informan que este lunes se cumplirán tres meses de que decidieron abandonar sus comunidades en la Sierra de Leonardo Bravo, debido a las amenazas de “un grupo delincuencia que se ostenta como policía comunitaria, los cuales no conformes con eso se han robado todas nuestras pertenencias”.
Explican que desde el 11 de noviembre viven de manera provisional en el auditorio municipal de Chichihualco, “sin que el gobierno del estado haya hecho nada por garantizar nuestro derecho a la vida, a la integridad física, a nuestro patrimonio y a la seguridad pública”.
Aseguran que su “única esperanza es que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, nos reciba y pueda atender nuestras demandas para regresar a nuestras comunidades: el repliegue del grupo armado que ocupa nuestras comunidades hacia sus lugares de origen, la instalación inmediata de un perímetro de seguridad en los límites de ambos municipios, que el gobierno federal tome en sus manos la seguridad pública del corredor carretero Corralitos-Casa Verde y Corralitos-Polixtepec; el pago de todo lo que nos han robado; cumplimiento de la Ley 487 y los estándares internacionales en materia de desplazamiento; demandamos salud, educación, alimentación, empleo y seguridad pública”.
Informaron que aún no escogen qué día de la semana que está por iniciar viajarán en un autobús a la capital del país, pero adelantaron que cuando lo hagan se instalarían en plantón indefinido afuera de Palacio Nacional, donde todos los días ofrece una conferencia de prensa el mandatario nacional.
Señalan que la intención es que López Obrador los pueda atender antes o después de su conferencia matutina que ofrece, porque “estamos cansados que del tema sepan funcionarios federales, estatales y nadie nos atienda; por eso vamos a tratar de buscar una audiencia con el presidente y que escuche nuestra desesperación que a tres meses de haber sido desplazados de nuestros hogares estamos exigiendo que podamos volver con todas las garantías de que no haya una agresión” de los comunitarios de Tlacotepec.
Añadieron que además recaudar recursos en la caseta de la autopista, en Chichihualco, las mujeres venden comida y organizan rifas para garantizar el traslado a la capital del país y buscar una audiencia con López Obrador.
Consideraron que es urgente que haya una reconstrucción del tejido social en esas comunidades de Desplazados, “quien lo puede garantizar es el presidente Andrés Manuel López Obrador a quien le hacemos un llamado a que ponga atención a este grave problema en Guerrero”.
La toma de la caseta duró poco más de 3 horas y los manifestantes se retiraron de ese lugar sin que se presentara algún incidente y regresaron a su refugio en el auditorio municipal en Chichihualco.