* Diputados de ese partido coincidieron en que despenalizar la siembra de esa flor de la que se extrae la goma para fabricar heroína, contribuirá a pacificar al estado

Alondra García

Al grito de “becarios sí, sicarios no”, unos 500 jóvenes de todas las regiones de Guerrero concluyeron un foro sobre la despenalización del cultivo de la amapola con fines medicinales, organizado por diputados locales y federales del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) con el objetivo de construir una iniciativa de ley respecto a este polémico tema.
Ante los legisladores, los jóvenes expusieron sus argumentos a favor de la despenalización de la amapola, no sólo para usos medicinales y científicos, sino también con fines lúdicos.
Coincidieron en señalar que la despenalización de este cultivo ilícito favorecería la pacificación de Guerrero, entidad que enfrenta una crisis de violencia a causa de la confrontación entre grupos delictivos rivales que disputan las zonas donde se produce esa flor y el tráfico ilegal de la goma que se le extrae.
En sus conclusiones, el diputado local Antonio Helguera Jiménez admitió que la despenalización y la legalización de la amapola podría ser una de las vías principales para lograr la paz en el estado.
“Necesitamos que la droga deje de ser un negocio para los grupos delictivos. Con la despenalización dejaría de ser un negocio clandestino, los grupos delictivos dejarían de monopolizar su comercialización y eso nos permitiría ser más responsables en su manejo”, expuso.
Sin embargo, reconoció que “hace falta más información” antes de impulsar una iniciativa que tenga como objetivo despenalizar el cultivo de esa flor.
La diputada local Norma Otilia Hernández Martínez coincidió con su compañero Helguera Jiménez en la necesidad de “trabajar más a fondo” la propuesta.
Criticó que “el abandono del campo permitió la migración de campesinos y generó el consumismo”, razón por la que “hoy ya no sembramos maíz, sembramos amapola por el abandono del campo de las políticas neoliberales rapaces”, apuntó.
Por ello, consideró que paralelo a la despenalización del cultivo de la amapola tendrán que impulsarse proyectos productivos y programas sociales que reactiven el campo, además que advirtió sobre la necesidad de “cambiar las leyes y atacar la corrupción de los altos mandos” del Ejército y corporaciones policicas.
Aseveró que “mientras más ilegal sea la droga, más se corrompen un policía o un militar del más alto nivel”.
La diputada local Zaira Reyes Iruegas afirmó que es urgente “empezar a legislar y despenalizar las drogas naturales”, no así las drogas sintéticas, porque “esas no se deben legalizar porque son las que causan más prejuicios al organismo”.
La diputada federal Idalia Reyes Miguel aseguró que la guerra contra el narcotráfico es “insostenible”, porque “los narcos tienen mejor armamento que el Ejército”.
Consideró que “en torno al narcotráfico se generan cortinas de humo” para esconder “grandes saqueos en el país que quedan ocultos tras la violencia”.
Reyes Iruegas afirmó que con la despenalización del cultivo de la amapola “se pondría fin al narcomenudeo”, mientras que su compañera Araceli Ocampo Manzanares coincidió con ella en que “bajaría la delincuencia organizada y el narcotráfico”.
La legisladora local Yolotzin Domínguez criticó que los jóvenes que participaron en el foro “todos se salieron de contexto” al confundir la despenalización del cultivo de la amapola con la legalización, por lo que los invitó “a poner atención” y “a superarse”.
En sus conclusiones, dijo que la despenalización del cultivo de la amapola con fines medicinales permitiría que el gobierno deje de gastar millones de pesos en el combate al narcotráfico, para que esos recursos se destinen a otros rubros como educación, salud y apoyos a proyectos productivos para emprendedores.