* El gobernador explicó que “grupos delincuenciales están en el ánimo de confrontar y de ejercer el control” en el territorio, y advirtió que es un problema que “no se acabará en uno ni en dos días”
* Afirmó que desde el miércoles hay un operativo en esa zona en el que participan elementos del Ejército y policías estatales, para que se reanuden las actividades en escuelas y centros de salud
Rosario García
Además de informar que su gobierno ya toma medidas para que escuelas y centros de salud reanuden sus actividades en pueblos de la Sierra, donde se vive una guerra por el control de las tierras para la siembra de la amapola y el trasiego de la goma que se le extrae a esa flor, que sirve para fabricar heroína, el gobernador Héctor Astudillo Flores advirtió que el problema “no se acabará en uno ni en dos días”.
El mandatario estatal informó que desde el pasado miércoles pasado, cuando se registró la incursión de decenas de hombres armados en La Laguna y otros poblados de la sierra, se desplegó un operativo conjunto con la participación de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Policía del Estado, especialmente en los sitios más críticos donde se han presentado confrontaciones o agresiones en la sierra guerrerense.
Cuestionado sobre los reportes de que este domingo habían ocurrido nuevos enfrentamientos entre grupos delictivos, Astudillo Flores señaló que desde temprana hora autoridades policiacas hicieron un sobrevuelo en helicóptero para tener una visión más clara de lo que estaba sucediendo en la zona de conflicto.
Dijo que tras los reportes de que había enfrentamientos en pueblos ubicados en la carretera estatal que conduce a Tlacotepec, se movilizaron 22 grupos de la Policía del Estado hacia la zona, y contaron con el apoyo de elementos del Ejército.
El gobernador lamentó que los enfrentamientos entre bandas del crimen organizado en la Sierra de Guerrero sean “un problema muy sensible”, pero “es un asunto cíclico que de alguna manera hay que pararlo”.
Añadió que “está muy claro que grupos delincuenciales están en el ánimo de confrontar y de ejercer el control de los dominios del territorio”, y reiteró que el problema persiste por la siembra de la amapola y el trasiego de la goma que se le extrae, “es un tema fundamental”.
Precisó que “sin duda es la guerra por el control y es una guerra que no va terminar ni en uno, ni en dos días, lamentablemente. Es un asunto que se presenta porque están tratando de controlar el paso, la siembra y todo lo que representa que hay ahí”.
Lamentó que por la inseguridad que priva en la zona “no hay muchas escuelas en clases”, y reveló que “la semana pasada se intentó hacer un operativo para subir a los maestros, se va seguir insistiendo para que los maestros lleguen. Y en eso la Secretaría de Educación y la Secretaría de Seguridad Pública están participando”.
Agregó que también el hospital de Filo de Caballos se encuentra cerrado, pero adelantó que “lo vamos abrir por supuesto, ya veremos las medidas a partir de mañana. A partir de mañana vamos a establecer cómo vamos a cuidar el hospital y como vamos hacer que lleguen los maestros”.