* El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa justificó su insistencia porque, recalcó, “el diálogo es una ley de oro, la cual debe anteponerse para conocer los motivos por los que una persona, incluso los criminales, actúan de determinada manera”
Redacción / Jesús Saavedra / Con información de Bajo Palabra
El diálogo con los grupos del crimen organizado es un tema que debe ser abordado en los foros de pacificación convocados por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, con el fin de encontrar instrumentos que contribuyan a la disminución de la violencia, afirmó Salvador Rangel Mendoza, obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa.
Además calificó de “desafortunada” la afirmación oficial de que muchos de los jóvenes que han sido asesinados en esta ola de violencia se debe a que están inmiscuidos con la delincuencia.
El obispo Rangel acudió la tarde de este domingo a la inauguración del Centro de Derechos Humanos “Minerva Bello” de la Sociedad Misionera para Víctimas y que se ubica en la avenida Gobernadores, en Villas Adame de esta capital.
El obispo lamentó la declaración atribuida al gobernador del estado, Héctor Astudillo, hace un par de semanas en el puerto de Acapulco, la que calificó de “desafortunada”, porque en Guerrero muchas de las víctimas de la violencia son los jóvenes.
Las estadísticas indican que la mayoría de los asesinatos son del crimen organizado, “otras han sido víctimas colaterales, otras abiertamente inocentes y creo que meterlos en un mismo costal no es justo”.
El prelado aseveró que “lavarse las manos diciendo que los jóvenes murieron debido a sus actos y su vinculación con el narcotráfico es injusto, siendo que la gran responsabilidad de la seguridad es del gobierno”, que tienen que garantizarla a toda la sociedad y en particular “a nuestros jóvenes”.
Salvador Rangel justificó su insistencia en buscar dialogar con los grupos de la llamada delincuencia organizada porque, recalcó, que el diálogo “es una ley de oro”, la cual debe anteponerse para conocer los motivos por los que una persona, incluso los criminales, actúan de determinada manera.
Escuchar a todos “desinflama” una bomba de tiempo y ello favorece a la construcción de la paz.
“Siempre ha sido una ley de oro el diálogo, conocer por qué una persona actúa de cierta manera, (porque siempre) hay una causa. ¿Por qué no también preguntarles a estos señores del crimen las razones por las que actúan así?. Escuchar, saber el porqué de las actitudes de otras personas, ayuda mucho. Yo siempre he hablado del diálogo, de escuchar a los demás”, dijo.
Destacó que ante la falta de oportunidades para estudiar y trabajar, los jóvenes se ven orillados a involucrarse en grupos delictivos, pero se debe a que no encontraron otras alternativas de vida. Por esa razón, dijo que se deben dar opciones de desarrollo a los jóvenes para evitar su incursión en actividades criminales.
IMPUNIDAD EN EL CASO DE DOS SACERDOTES ASESINADOS
El obispo Rangel dijo que en Guerrero que hay impunidad, pues desde el 5 de febrero pasado que asesinaron a dos sacerdotes en Taxco no se ha detenido a los responsables y ni se ha esclarecido el móvil de ese doble crimen; “desgraciadamente no tenemos una respuesta satisfactoria”.
Se quejó de que la Fiscalía General del Estado (FGE), “revictimiza a quienes han caído difuntos, la misma sociedad revictimiza a las personas y creo que no es justo; no se resuelven los casos correctamente como el de los dos sacerdotes que fueron asesinados en Taxco”.
LÓPEZ OBRADOR HA SEMBRADO ESPERANZA
El obispo se refirió a las promesas que ha hecho el presidente electo Andrés Manuel López Obrador: “está haciendo muchas declaraciones positivas, pudiera decir que eso nos da esperanza, confianza que las cosas vayan a cambiar”.
El gobierno que tomará posesión el 1 de diciembre, “no tiene una varita mágica para que cambien las cosas, pero ha sembrado confianza y esperanza en la población y eso ya es positivo”.
“Necesitamos la participación de la ciudadanía y que ésta se empodere de sus comunidades, porque hay más gente buena que mala y no es justo que estemos bailando con esa musiquita que nos tocan los malos”, expresó.
Recordó que una de esas propuestas para pacificar al país es el de legalizar el cultivo de amapola con fines medicinales y se refirió al anuncio de los diputados locales que están por concluir su mandato el último día de agosto que ya tienen un dictamen para la despenalización del cultivo de amapola
Sobre la situación en la convulsionada zona de Chilapa y otros municipios cercanos, en lo que se conoce como la Montaña Baja, expresó que su trabajo tiene como principal objetivo la pacificación, bajar los índices de delitos, y eso según él sólo se logrará con base en el diálogo.
“Ahora en las campañas varios candidatos vinieron a pedirme que hablara con los capos para que los dejaran hacer su política para la elección y gracias a eso en el territorio no hubo políticos asesinados, son hechos concretos [a los] que ayudan al diálogo, la relación, a evitar muertes”, manifestó.