* El secretario de Salud, Carlos de la Peña confirmó que 16 centros de salud permanecen cerrados debido a la inseguridad en la zona
ROSARIO GARCÍA
Unos 16 centros de salud permanecen cerrados a causa de la inseguridad y la violencia en localidades de la Sierra de Guerrero, particularmente, del municipio de Heliodoro Castillo, informó el titular de la Secretaría de Salud en el estado, Carlos de la Peña Pintos.
El funcionario mencionó que la dependencia a su cargo, tiene la obligación de proteger a sus trabajadores, por lo que se cierran los centros sanitarios en las comunidades donde se registran repuntes de violencia, que a últimas fechas ha sido frecuente debido a la confrontación entre grupos de la delincuencia organizada, en tanto que los médicos y enfermeras se concentran en la jurisdicción sanitaria que les corresponde.
Reconoció que luego de un enfrentamiento en las localidades de Corralitos y Puentecillas, los médicos optaron nuevamente por no acudir a sus centros de trabajo, ya que en algunos casos, son retenidos por algunas horas.
Explicó que el 98 por ciento de las clínicas, centros de salud y casas de salud que existen en el estado están funcionando normalmente, salvo estos 16 espacios ubicados en comunidades serranas de las regiones Centro y Tierra Caliente, porque se intensificaron los enfrentamientos entre grupos delincuenciales.
A esos lugares donde no hay médicos ni enfermeras laborando, se envían brigadas con el apoyo de personal de la organización Médicos Sin Fronteras (MSF).
Por otro lado, De la Peña Pintos aseguró que la asociación no gubernamental “Marie Stopes” no cuenta con la autorización para funcionar como clínica para asesorar a jóvenes y adolescentes en temas de salud reproductiva, además de que sus directivos fueron citados por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Lo anterior, porque la organización no gubernamental Marie Stopes, pretende que su clínica proporcione asesoría sobre salud sexual y para la interrupción legal del embarazo, con la justificación del alto número de muertes que se registran por abortos clandestinos y mal aplicados.
El funcionario estatal aseguró que de momento la clínica se encuentra clausurada, porque de acuerdo a la legislación en Guerrero no está permitido el aborto salvo por violación, malformación del feto o porque el embarazo ponga en riesgo la vida de la mamá.
Luego de varias denuncias en redes sociales sobre la instalación de dicha clínica, “nosotros visitamos el lugar para hacer las verificaciones y se mandaron documentos a la Cofepris estatal y con respeto al Código Penal”, dijo Carlos de la Peña.