* “Un aborto es un asesinato”, sentenció el obispo

Alondra García

“Un aborto es un asesinato”, sentenció el obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, ante los reclamos de grupos feministas que exigen la apertura de ‘Marie Stopes’, una clínica especializada en interrupción legal del embarazo.
En entrevista, el prelado rechazó la instalación y operación de la “clínica abortista”, pues advirtió que ésta va contra el quinto mandamiento: “No matarás”. 
Sostuvo que desde el momento de la gestación existe vida en el vientre de la mujer y que ésta debe defenderse, por tratarse del derecho humano fundamental.
Rangel señaló que “existen presiones a nivel nacional y a nivel internacional” para legalizar la interrupción del embarazo en las primeras 12 semanas de concepción.
Sin embargo, sentenció que la Iglesia Católica, los creyentes y la mayoría de los ciudadanos no están de acuerdo con esta práctica. 
Aclaró que este rechazo no se traduce a una imposición sobre el cuerpo de las mujeres. 
“Estoy totalmente de acuerdo en que cada quien tiene derecho a decidir sobre su cuerpo. La gente tiene derecho a cortarse una oreja o la nariz, aunque nadie piense que esté bien psicológicamente. Pero un feto no es parte del cuerpo de la mujer, es una criatura nueva, un ser distinto con derechos”, apuntó. 
El obispo hizo un llamado a las autoridades a cancelar “definitivamente” los permisos para la apertura y operación de la clínica ‘Marie Stopes’. 
“En este clima de crispación en el país y en Guerrero, meter un problema más dificultaría más las cosas”, sentenció.