* Rigoberto González, miembro de esa organización, dijo que el kilo de esa sustancia base para fabricar heroína cuesta hoy 8 mil pesos, cuando hace unos años valía hasta 30 mil pesos
* El 95% por ciento de los habitantes de mil 287 comunidades de la sierra participan en la siembra, cosecha, traslado y venta de esa droga, aseguró
Rosario García
El incremento de la violencia en Guerrero podría deberse a que el precio de la goma de amapola bajó “estrepitosamente”, porque la siembra, cosecha, traslado y venta de ese enervante, forman parte de las principales actividades económicas de mil 287 comunidades de la sierra de entidad, donde viven de esa labor unos 150 mil guerrerenses.
Rigoberto Acosta González, dirigente del Consejo Regional de la Sierra de Guerrero, mencionó que el cultivo, siembra y trasiego de enervantes, particularmente de goma de amapola en la sierra de Guerrero, no es un tema nuevo, y recordó que inició en los años 60’s, cuando en Sinaloa ya no tenían tierras suficientes para sembrar y llevar el producto a Estados Unidos, el principal consumidor de drogas en el mundo.
Añadió que la siembra de enervantes en la sierra guerrerense también es un asunto de cultura, porque son ya por lo menos cinco o seis generaciones, en esas mil 287 comunidades de la sierra de Guerrero, donde quizá el 95 por ciento de la población participa en alguna de las etapas del proceso, desde la siembra hasta la venta de la goma de amapola.
Acosta explicó que en las comunidades enclavadas en la sierra y que pertenecen a 14 municipios, esa actividad rebasó en importancia la ganadería, la agricultura y la industria forestal.
Reveló que ahora se calcula que en promedio se siembran 24 mil hectáreas con amapola en la sierra de Guerrero, donde hasta hace unos años se vendía en unos 30 mil pesos el kilo de goma de opio y hoy en precio fluctúa apenas en los 8 mil pesos por kilo.
El exsecretario de Desarrollo Rural del estado consideró que es la baja del precio de la goma de opio, lo que ha disparado los índices de violencia en buena parte del estado, porque muchas familias se quedaron sin sustento y varios de sus integrantes han sido presa fácil de los grupos delincuenciales que ahora realizan ilícitos como robos de autos, secuestros, extorsiones y homicidios.
Calificó como “terrible” lo que está pasando en la sierra debido a esa situación, que está representando una crisis profunda en familias y comunidades de la región.
Advirtió que “quizá como consecuencia, los niveles de violencia tengan que incrementarse o por lo menos cada vez habrá mayor participación de personas en la desesperación por ganarse un peso”.
Por ello, Acosta González propuso mayor inversión a la región de la sierra en cuanto a caminos, centros de salud, escuelas proyectos productivos que permitan diversificar los cultivos, de tal manera que se siembren productos legales como aguacate, durazno, flores, se fomente la industria forestal, y que con una red carretera adecuada se puedan trasladar los productos del campo para su venta en los mercados locales o nacionales.