* Familiares de Giovanny Vélez “El Vaquerito”, lanzaron un “ya basta de matarnos, ya acabaron con mi familia”

Bernardo Torres

El asesinato de Giovanny Vélez García, “El Vaquerito”, joven de 21 años de edad, en Chilpancingo, quien fue sepultado este fin de semana, ha causado conmoción en la sociedad de esta ciudad y así lo hicieron notar durante su despedida.
El cuerpo fue hallado la noche del 1 de febrero, con las manos atadas hacia atrás, y al parecer fue arrojado desde un puente sobre la Autopista del Sol, en dirección a la Ciudad de México, a la altura del poblado de Huiziltepec, municipio de Eduardo Neri, a unos minutos de Chilpancingo.
El viernes fue reclamado en el Servicio Médico Forense (Semefo), por sus familiares, velado en su domicilio, cerca del Libramiento a Tixtla y desde ahí trasladado al Panteón Central, donde este sábado fue despedido por cientos de personas, entre amigos, familia, y compañeros de hobbies.
Giovanny era amante de las charreadas, incluso tenía un yegua pura sangre, con la cual a menudo subía fotografías a la red social Facebook, donde se aprecian sus últimos días de vida, sus conversaciones, y donde también dan cuenta de quien fue en vida, la última víctima hasta hoy de la violencia en esta ciudad.
“Con la fe y la ayuda de Dios, este 2018 cumpliré mis sueños y mis metas”, se lee en su foto de portada, escrita el 1 de enero, mensaje que fue destacado durante su sepelio, en el Panteón Central la tarde del sábado, “mataron a un joven con mucha energía, con toda la inercia hacia adelante”, exclamó uno de los asistentes.
El recorrido por la ciudad fue encabezado por una de las tradicionales bandas de “chile frito”, y al son de “La Rabia”, su féretro fue introducido con los últimos minutos del sol en el horizonte, al sepulcro donde su cuerpo permanecerá por siempre.
No así su espíritu: “El alma de un joven que supo amar, no morirá, y su espíritu vivirá con nosotros por siempre”, dijo quien tenía la palabra al momento de su último adiós.
Su madre gritaba al cielo, gritaba a los asesinos de su hijo; “ya paren de matarnos, ya acabaron con nuestra familia”, recordó, pues otro de sus hijos y un hermano, perdieron la vida en medio de esta ola de violencia que se vive en Guerrero, y acentuada en Chilpancingo, como en otros seis municipios.
El amor de su vida —de cuatro patas— como él decía, llegó hasta su tumba para despedirse también, “La Gringa”, una yegua pura sangre, con un beso a la caja de madera: “En caballo, llegué, y en caballo me voy, soy el arquitecto de mi futuro”, decía un post en su ‘muro’, con fecha del 26 de enero.
Su hermano menor se aferró al ataúd durante varios minutos, “siempre te voy a querer un chingo, siempre fuiste mi carnal, mi segundo hermano que me quitaron, carnalito, y voy a estar contigo, hasta arriba Giovanny”, gritó, al momento que varios niños elevaron globos blancos con la leyenda “Adiós Vaquerito”.
Con el dolor a tope tras ser despedido por la mayoría de sus familiares, el ataúd desapareció de la vista de los presentes bajo una plancha de cemento, a lo que siguieron gritos de justicia, alto a la violencia.
“Estamos viviendo una locura, quienes lo hicieron no pensaron en lo que hoy está pasando esta familia”, dijo otro de los acompañantes, quien además pidió a los chilpancinguenses y guerrerenses no ser ajenos al dolor de quienes pierden a sus hijos, y salgan a solidarizarse.
Aún no se explican del porqué la saña en contra de esta familia, quizá por la envidia, explicó, por ser mejor que otros, y por envidia hicieron esta locura, “no sabían que con esto lo llevaban más alto que ellos”.

Frases que inundaron sus redes sociales

Giovanny, un joven con toda la energía, era muy activo en las charreadas, amante de los caballos, siempre de sombrero y botas, también le gustaba la música de banda, romántico y divertido, según cuentan sus redes sociales,
Ahí fue donde se dio cuenta de su partida, y de su cruel destino; el 2 de febrero desde temprana hora, fotografías suyas, acompañado de amigas y amigos fueron colgadas de su muro de Facebook, acompañadas de estremecedores mensajes, mucho llanto y enojo por lo sucedido.
Algunos recordaron sus últimas conversaciones, la última vez que se vieron, arrepentidos de no haberle dicho un te quiero o haberle dado un abrazo, incrédulos ante su muerte.
“Ahora estás en el cielo formando parte de las estrellas, sigo sin asimilar lo que pasó, fuiste un gran hombre sencillo, honesto, humilde que descanses en paz GVG”.
“Mi Giova, de saber que hace una semana sería la última vez que te veía, aún no puedo creerlo te extrañaré montones”.
“No puedo creer que te hayas marchado, hace apenas unos días que te vi, estaba todo tan bien, estabas alegre como siempre, haberme enterado de esta noticia duele, fuiste una gran persona, un buen amigo, ese güerito coqueto que eras siempre te recordaré veci”.
Giovanny Vélez García Mi Querido! Esas Conversaciones Que No Se Van A repetir Más! Esa Amistad Que Teníamos! Y Me Parte El Alma Saber Que Ya No Estarás Más Aquí Con Nosotros! Conmigo! Yo Sé Que Desde Allá Nos Cuidas Porque Eres Un Angelito Más En El Reino De Dios! Y Están Contentos De Recibir A Una Gran Persona Como Tu! Te Quiero Querido! Mi Chulo! Hasta Pronto”.
Fueron sólo algunos de los mensajes, las muestras de afecto y cariño, que conmocionaron las redes, durante los últimos tres días. (API)