*El exalcalde de Chilpancingo calificó como “muy grave” la situación en la Secretaría de Seguridad Pública de la capital y recordó que en su administración él liquidó a 250 policías que no pasaron exámenes de control y confianza
Jesús Saavedra
Después de calificar como “muy graves” los señalamientos contra policías municipales por estar involucrados en las desapariciones de varios jóvenes durante la última semana de 2017, de los cuales dos siguen sin aparecer, el exalcalde de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos, dijo que “se tiene que llevar a proceso a algunas otras gentes que están posiblemente involucradas” en lo ocurrido.
El actual delegado del ISSSTE en Guerrero fue cuestionado sobre la crisis que se vive en la Secretaría de Seguridad Pública de la capital, considerándola como “algo grave, crítico, definitivamente la intervención que hoy se está haciendo es importante, es buena”.
Moreno Arcos, quien gobernó Chilpancingo entre 2012 y 2015, antes de Marco Antonio Leyva Mena, recordó que en su administración “llevamos a todos los policías a una evaluación, de los cuales 250 no pasaron su examen de control y confianza; a todos los di de baja, a todos los liquidé”.
Afirmó que “lamentablemente no solo en Chilpancingo” existe este problema, porque “en el país hace falta consolidar un proyecto que verdaderamente ayude, ese proyecto que se traía del Mando Único quedó en el aire desafortunadamente y deja en indefensión a todos”.
Señaló que de acuerdo con las autoridades del municipio, son 120 o 130 los elementos policiaco certificados, lo que “para una ciudad que tiene más de 300 mil habitantes es verdaderamente grave, crítico, y más con la participación aquí de grupos delincuenciales que definitivamente pegan de una forma u otra”.
Expresó que tiene “confianza que con la intervención que se está haciendo del estado y la federación, se generen condiciones diferentes (de seguridad) en Chilpancingo”.
Reiteró que cuando en su gobierno evaluaron a los policías municipales, fueron “poco menos de 50 elementos los que pasaron los exámenes de control y confianza, fueron los únicos que dejé y de ahí se inició un proceso de contratación y desconozco lo que pasó después”.
Moreno Arcos presumió que fue “el único presidente municipal que a todos los elementos que no pasaron su examen de control y confianza, todos fueron liquidados de manera puntual y de acuerdo a la Ley, lo que no ocurrió en otros municipios, como el caso de Acapulco, donde siguen siendo policías, cosa que no sucedió en Chilpancingo”.
Añadió que “obviamente se inició un proceso de contratación de nuevos elementos y esto genera condiciones como las que hoy se presentan lamentablemente”.
Sobre la decisión del Grupo de Coordinación Guerrero de intervenir a esa corporación, dijo que “fue lo mejor que se hizo, asumir el control de la seguridad en el municipio ante evidencias tan claras, tan contundentes, definitivamente fue lo mejor y creo que mientras no haya condiciones de un Mando Único de una corporación policiaca municipal fuerte, no debe dejarse el mando” de nuevo al gobierno municipal de Chilpancingo.
Agregó que los habitantes de la capital “hoy reclamamos y exigimos seguridad, las familias de Chilpancingo tenemos la confianza en el gobernador del estado y esas acciones que está tomando genere condiciones diferentes de seguridad en Chilpancingo”.
Finalmente dijo que la investigación que se realiza a la policía capitalina “debe arrojar resultados, hemos visto videos que son muy críticos, graves y creo que las condiciones deben ser otras en las cuales se tiene que llevar a proceso a algunas otras gentes que están posiblemente involucradas”, finalizó.