* El tabasqueño dijo que no importa la aprobación de la Ley de Seguridad Interior, porque con él las cosas van a mejorar en el país
* Dijo que no hace campaña adelantada, sino que como dirigente de Morena viene a informar a los ciudadanos
* Aseguró que el registro de José Meade como precandidato presidencial del PRI es “una gran hipocresía”
Redacción
Después de que gane la elección de presidente de la República el próximo año, las cosas van a mejorar en el país y entonces “habrá seguridad”, aseguró el dirigente nacional de Movimiento de Regeneración Nacional, Andrés Manuel López Obrador.
En declaraciones que hizo a Milenio durante su último día de gira por Guerrero en el que visitó municipios de Tierra Caliente, una de las zonas más inseguras del estado, el político tabasqueño restó importancia a la aprobación de la Ley de Seguridad Interior que fue aprobada por la Cámara de Diputados y ahora está a consideración del Senado.
López Obrador aseguró que independientemente de lo que se apruebe, ya falta poco para que él gane la Presidencia de la República y entonces muchas cosas van a mejorar en el país y “habrá seguridad”.
Aseguró que a pesar de los problemas de inseguridad que se registran en Tierra Caliente, la gente no ha perdido la fe en que haya un cambio real, de ahí que se mantenga en la ruta de fortalecer a Morena como una opción para la sociedad.
Por otra parte, al referirse al señalamiento que hizo el gobernador Héctor Astudillo Flores de que realiza una campaña muy adelantada, López Obrador aseguró que los recorridos que realiza son en calidad de dirigente nacional del Morena.
“Lo que hace un dirigente de partido es informar, a eso vengo para informar. ¿O quieren que me engarrote y me quede en la oficina en México? No, nosotros tenemos que hacer trabajo desde abajo”, indicó.
Después cuestionó que los dirigentes del Partido Revolucionario Institucional pasan el tiempo en restaurantes de lujo, aprovechando que tienen la cobertura de muchos medios de comunicación, pero él, en cambio, debe hacer trabajo pueblo por pueblo.
En Taxco, al concluir su recorrido por Guerrero, López Obrador calificó como “una gran hipocresía” el registro del exsecretario de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña, como precandidato del PRI a la Presidencia, y aseguró que “es muy corrupto igual que (Enrique) Peña”.
Antes, en su discurso, el tabasqueño ofreció que apoyará a los trabajadores mineros, con quienes se han ensañado “los amos y señores de México” y afirmó que cuando triunfe en las elecciones, habrá libertad sindical y se terminará la persecución.
Consideró que “los meros de arriba” son mineros muy influyentes y acusó al director de Grupo México, Germán Larrea, de imponer al secretario del Trabajo, Alfonso Navarrete Prida, con lo que lograron expulsar de México al dirigente de trabajadores mineros Napoleón Gómez Urrutia.
López Obrador reiteró su llamado sobre prepararse para enfrentar la “estrategia perversa” que se intensificará en su contra durante el proceso electoral, porque se pretenderá asustar a la población con el discurso de que si gana Morena, México será como Venezuela.
“Falso. Nosotros no tenemos que ir a buscar ejemplos al extranjero, (en México) nos dejaron lecciones para luchar por la verdad por la justicia”, aseveró, y puntualizó que en la última encuesta efectuada en 26 estados de México, en 24 de ellos Morena ocupa el primer lugar, aún en estados del norte, y en el caso de Guerrero dijo que está 20 puntos arriba.