* Xavier Olea criticó que mientras por un lado cuestionan la producción de drogas y la violencia que generan grupos delictivos, los norteamericanos son los mayores consumidores de heroína y de allá provienen las armas que usan grupos delictivos
Rosario García
El fiscal Xavier Olea Peláez acusó que el gobierno norteamericano tiene una doble moral, porque por un lado cuestiona a Guerrero por la producción de enervantes y alta incidencia delictiva, mientras los norteamericanos son los mayores consumidores de esas drogas, además de ese país provienen las armas que usan los grupos delincuenciales que operan en la entidad y que generan la violencia.
Cuestionado sobre su opinión en torno al estudio que se difundió en medios nacionales y redes sociales en el que se señala que la Fiscalía de Guerrero es la que menos resultados ha dado en todo el país, el fiscal respondió que no se puede comparar la situación en Guerrero con otros estados del país, porque no son iguales todas las entidades.
“No estoy de acuerdo en esos señalamientos que salieron en la televisión, no estoy de acuerdo porque no podemos comparar Guerrero con Yucatán, simplemente por los índices delincuenciales que se heredaron históricos que tenemos en Guerrero”, argumentó el titular de la FGE.
Precisó que las diferencias van desde “el número de habitantes, el número de bandas delincuenciales”, hasta “la producción de amapola, y es que aquí se produce mucha amapola y los americanos están consumiendo muchísima heroína, por eso hay una venta-consumo muy alto”.
Olea Peláez calificó como de doble moral el discurso del gobierno de Estados Unidos al hacer señalamientos contra Guerrero por la producción de amapola y la violencia, cuando ese país el mayor consumidor de heroína y de donde llegan a México las armas que usa la delincuencia.
En varias ocasiones el gobierno de Estados Unidos ha exigido al de México un freno a la producción de drogas, “pero están armando a los grupos delincuenciales”, criticó.
Por otro lado, el fiscal reconoció que hay por lo menos 40 bandas delictivas que operan en Acapulco, y unos 10 grupos delincuenciales “más grandes” son los que en todo el estado.
Finalmente, y luego de que algunos legisladores locales consideraran necesario llamar a comparecer al fiscal, por la alta incidencia delictiva y la alta impunidad que se registra, Olea Pelaéz dijo estar preparado para comparecer cuando los diputados se lo pidan.