* Dio a conocer que desde este domingo se desplegó un fuerte operativo con 600 militares y policías en La Gavia, para detener al “Tequilero”
Jesús Saavedra
Ante los hechos de violencia que se registran en Guerrero las policías municipales deben actuar y no dejar toda la responsabilidad a las autoridades estatales, sostuvo el gobernador Héctor Astudillo Flores quien aseveró que en el “enfrentamiento” donde murieron siete personas en la Sierra de Tlacotepec están identificados los grupos que participaron como víctimas y victimarios.
Este domingo, en Casa Guerrero, el gobernador Astudillo hizo declaraciones y se refirió a esos hechos ocurridos en la comunidad de Las Juntas, municipio de Heliodoro Castillo, en donde murieron siete personas en una emboscada.
Dijo que desde Puerto del Gallo, en el macizo de la zona serrana se trasladaron grupos de la policía del estado por tierra y aire para atender ese conflicto.
“Hubo un problema (y) la Fiscalía debe dar un informe de la investigación, hay más información pero no puedo decirla, no estoy en la condición de hacerlo y tampoco sería prudente”.
Calificó el hecho como un “enfrentamiento” y se negó a identificar a los grupos que participaron y se limitó a decir que fueron siete personas fallecidas; “los familiares plantearon no traer los cuerpos (para practicarles la necropsia de ley) no hubo por eso un problema y ni roces”.
El gobernador Astudillo recordó que en cada pueblo hay una policía rural y que los grupos que llegaron a la zona fueron de la policía del estado, por ello recriminó que “los policías municipales tendrían que hacer su trabajo, llegamos nosotros a un lugar complicado y es muy lamentable lo que sucedió”.
Justificó que no daba más información de ese suceso porque hay un nuevo sistema de justicia penal y que si declaraba algo “puede ser perjudicial para el expediente”.
“No tengo la posibilidad de abordar esos temas como lo hacíamos antes”, explicó.
En otro tema, dio a conocer que desde este domingo se desplegó un fuerte operativo con 600 militares y policías en la zona de La Gavia, localidad del municipio de San Miguel Totolapan, con la intención de detener a Raybel Jacobo de Almonte, jefe de la banda de secuestradores conocidos como “Los Tequileros”.