Alondra García Lucatero
Dos líderes del grupo delictivo La Familia Michoacana fueron abatidos a balazos e incinerados por pobladores de La Gavia, localidad ubicada en el municipio de San Miguel Totolapan.
Se trata de Jaime López Martínez, alias El Pizarrón y Ramiro Bahea Urieta, alias El Güero Pelayo, quienes habrían sido abatidos durante la irrupción armada realizada por La Familia Michoacana a La Gavia la madrugada del 11 de mayo.
Ese día, los pistoleros de la Familia Michoaana ingresaron a la comunidad y asesinaron a tres personas.
Los pobladores de La Gavia respondieron la agresión y asesinaron a cinco integrantes del grupo criminal.
Posteriormente retrataron los cuerpos de los cinco sicarios, los apilaron y les prendieron fuego en el centro del pueblo.
Los agentes de la Fiscalía General del Estado tuvieron acceso a las fotografías y constataron que entre los criminales se encontraban El Güero Pelayo y El Pizarrón.
El vocero del Grupo de Coordinación Guerrero (GCG), Roberto Álvarez Heredia, confirmó la versión.
Sin embargo, indicó que será necesario que se realicen las pruebas de genética a los cadáveres para confirmar su identidad.
Hasta entonces, dijo, la Fiscalía General del Estado y el Grupo de Coordinación Guerrero podrán informar de manera oficial sobre la muerte de ambos cabecillas de La Familia Michoacana.
De acuerdo con testigos de los hechos, el enfrentamiento armado que derivó del ingreso de La Familia Michoacana a La Gavia tuvo una duración de 13 horas, ya que comenzó desde la una de la madrugada y terminó hasta las dos de la tarde.
Según las versiones, los sicarios de La Familia Michoacana habrían llegado desde los municipios de Arcelia, Tlalchapa, Tlapehuala, Tlatlaya y la zona rural de Teloloapan.
Jaime López Martínez, alias El Pizarrón, es originario de Tlalchapa. Se le identifica como jefe de plaza de La Familia Michoacana en aquel municipio.
Ramiro Bahena Urieta, mejor conocido como El Güero Pelayo, es originario de Apaxtla. A él se le identifica como jefe de una célula de sicarios que opera entre los municipios de Teloloapan y Acapetlahuaya.
Los cuerpos de ambos jefes criminales y tres de sus sicarios fueron incinerados por los pobladores de La Gavia, quienes los relacionaron con el grupo de autodefensa Movimiento por la Paz de San Miguel Totolapan.
Este medio de comunicación tuvo acceso a las fotografías de los criminales al momento de ser ejecutados y después de ser incinerados por los pobladores.
Tras el enfrentamiento en La Gavia las autoridades ubicaron una camioneta blindada propiedad del alcalde de San Miguel Totolapan. Dentro de la unidad se encontró una credencial a nombre de Javier Domínguez, chofer particular del alcalde.
Algunos pobladores señalaron a Conrado Mendoza Almeda, hijo del presidente municipal, como jefe de plaza de La Familia Michoacana en San Miguel Totolapan. Esta versión ha sido desmentida por el alcalde, quien ha dicho que está abierto a que se le investigue.
Respecto a los tres pobladores de La Gavia asesinados por La Familia Michoacana, fuentes de la Fiscalía General del Estado informaron que tenían en común el apellido De Almonte, al igual que el líder del cártel de Los Tequileros, Raybel Jacobo de Almonte.
Los cuerpos de los tres asesinados fueron levantados por los propios pobladores y entregados a sus familias.