*Grupo armado “levantó” al oficial Daniel Vázquez y después irrumpió en el hospital de esa ciudad para exigir atención para un herido, pero enseguida también se llevaron a personal médico del nosocomio a bordo de una ambulancia

 

*Los delincuentes liberaron la unidad minutos después y se llevaron a su herido; en la noche apareció en Chilpancingo el cuerpo desmembrado del jefe policiaco secuestrado 

 

 

Después de “levantar” a un comandante de la Policía Municipal de Tixtla durante una balacera –cuyo cuerpo desmembrado fue encontrado anoche en Chilpancingo—, un grupo armado ingresó al Hospital Básico Comunitario de esa misma ciudad para exigir atención médica para un joven herido de bala, aunque minutos más tarde huyeron llevándose consigo a “personal médico” a bordo de una ambulancia, el cual fue liberado minutos después.

De acuerdo con información proporcionada por la Secretaría de Seguridad Pública, aproximadamente a las 7:30 horas de este martes,  un grupo de hombres armados que viajaban en un vehículo tipo Polo, color gris, privaron de su libertad al oficial Daniel Vázquez Gutiérrez, comandante de turno de la Policía Municipal de Tixtla, después de intercambiar algunos disparos con elementos de esa corporación, llevándoselo posteriormente con dirección a la salida Tixtla–Chilapa.

Sin embargo, minutos más tarde se recibió el reporte de que “un número indeterminado de personas del sexo masculino que viajaban a bordo de dos camionetas, una roja y una blanca, ingresaron armados al Hospital Básico Comunitario de Tixtla, exigiendo atención médica para un hombre de aproximadamente 25 años de edad que presentaba lesiones por proyectil de arma de fuego”.

Sin embargo, los hombres armados decidieron secuestrar al personal médico del nosocomio llevándoselo “a bordo de la ambulancia 1146 del propio hospital”, junto con el herido de bala que había sido llevado para que recibiera atención médica.

Seguridad Pública informó que después de esta acción, personal de la Policía del Estado, con apoyo del Ejército Mexicano, desplegó “un operativo de búsqueda y localización por aire y tierra con el fin de rescatar al mando policial privado de su libertad, al personal médico y ambulancia que fueron sustraídos del hospital”.

“Tan pronto como inició el patrullaje, el personal de la Policía Estatal encontró la ambulancia que ya regresaba a la cabecera municipal de Tixtla, después de que en el crucero a Quechultenango, los civiles armados bajaron y se llevaron al lesionado a bordo de uno de sus vehículos con rumbo desconocido”, informó Seguridad Pública.

Minutos más tarde, uniformados encontraron abandonada sobre un camino una camioneta marca Mitsubishi, color blanco, con placas de circulación HD3-00-46, con reporte de robo y tres impactos de arma de fuego en la puerta trasera del lado del copiloto.

“En la caja del vehículo se encontró lo siguiente: 2 chalecos antibalas camuflados verde olivo, un chaleco táctico camuflado verde olivo, un chaleco táctico color negro, 12 cartucheras, una base de radio marca RCI-2950, una máscara color negro, 2 uniformes color azul marino con la leyenda ‘Policía Municipal’, un uniforme azul marino con la leyenda ‘IPAE Guerrero’”.

“También un pantalón café con manchas hemáticas, un pantalón camuflado, una chamarra camuflada color verde olivo, sacos de avío color verde olivo, 2 playeras azul marino con la leyenda ‘Policía Municipal’, un par de botas militares color café, 2 machetes, varios tramos de cadena metálica, unas cizallas y 2 tablas de madera”.

En su comunicado, la SSP nunca precisó si el personal médico del Hospital de Tixtla fue dejado en libertad por los sujetos armados.

Alrededor de las 8 de la noche, vecinos de la calle cerrada Nicolás Bravo en esta capital, justo atrás del Panteón Municipal, encontraron cuatro bolsas de plástico negras que en su interior contenían los restos de una persona que fue desmembrada.

El lugar, donde se han registrado al menos otros 3 hallazgos similares en lo que va del año, fue acordonado por elementos de corporaciones policiacas mientras peritos de la Fiscalía y personal del Servicio Médico Forense realizaban el levantamiento de los restos humanos.

Poco después de las 10 de la noche después se informó que el cuerpo desmembrado era el del comandante Daniel Vázquez, quien fue reconocido por su hijo.

Trascendió que el jefe policiaco asesinado hacía labores de escolta del alcalde de Tixtla, Hossein Nabor Guillén.