* El perredista Gustavo García dijo que la inseguridad no sólo ha repuntado en su municipio, sino en todo el país, y señaló que es culpa de los malos gobiernos
ALONDRA GARCÍA
El alcalde perredista de Zihuatanejo, Gustavo García Bello, lamentó la escalada de violencia que se registra no sólo en su municipio, sino en todo el país, y señaló que la culpa es “de más de 80 años de malos gobiernos”.
La tarde de ayer, García Bello encabezó el acto solemne para despedir con honores a Pablo Hurtado, Cesáreo Sánchez y Efraín Guillén, los tres policías municipales que fueron asesinados por un grupo armado en un módulo de seguridad en Ixtapa.
Posteriormente, el alcalde publicó una reflexión en su cuenta de Facebook en la que se lamentó por el repunte de los hechos delictivos en Zihuatanejo, pero culpó a los gobiernos del PRI y del PAN que han gobernado al país, y reprochó la corrupción que impera no sólo en los gobiernos, sino también en la sociedad.
“Es muy lamentable la violencia que se está viviendo en nuestro municipio, en nuestro estado y en nuestro país. Esta violencia no se generó ahora. Es el resultado de más de 80 años de malos gobiernos. Nos heredaron una sociedad corrupta, sin principios ni valores. Se dejó de educar, de generar oportunidades y de proveer de un mejor entorno para las nuevas generaciones”, escribió García Bello.
Para afrontar esta violencia, dijo el alcalde, cada orden de gobierno debe hacer su parte dentro del ámbito de sus obligaciones, responsabilidades y competencias.
Señaló que al municipio le corresponde la prevención del delito, el cuidado del orden público y acciones de vigilancia. Esto se logra, dijo, a través de la presencia policial en la vía pública.
“Esa es la función que desempeñaban nuestros compañeros al momento de ser agredidos”, indicó en referencia a los policías atacados antier por un grupo armado, un hecho que dejó un saldo de tres elementos muertos y dos heridos.
García Bello insistió en que la única manera de hacer frente a la violencia es con la coparticipación de la sociedad y el gobierno.
“Educar a nuestros hijos y nuevas generaciones, fomentando valores básicos como el amor, el respeto a los demás y a las instituciones; el diálogo, la tolerancia, la solidaridad, el compromiso, la palabra, la honestidad, el agradecimiento, la lealtad, el esfuerzo y el trabajo; la perseverancia, saber escuchar, la equidad, la justicia, la legalidad. La responsabilidad es de todos, sociedad y gobierno”, expuso el alcalde perredista.