* Roberto Álvarez dijo que “la violencia está acotada en determinados puntos”, como ocurre en Chilapa, y es resultado de “un enfrentamiento en las penumbras” entre grupos criminales

 

Jesús Saavedra

 

Después de descartar que haya un toque de queda impuesto los grupos del crimen organizado en ciudades como Chilapa y Chilpancingo, donde se libra un “enfrentamiento en las penumbras”, el vocero de del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia, aseguró que los operativos de seguridad “han logrado proteger a la población” en esos lugares.

Este jueves, el vocero en materia de seguridad se refirió a la ola de violencia que mantiene en vilo a los habitantes de Chilapa, de manera particular, y aseguró que “sin negar, ni minimizar el asunto de seguridad y la violencia que existe en el estado, lo digo con responsabilidad que la violencia está acotada en determinados puntos”.

Álvarez Heredia aseguró que en esos lugares donde se presentan hechos de violencia, “las instituciones de seguridad del estado y la federación están trabajando de manera cotidiana para proteger a la población, como en Chilapa, Chilpancingo, donde hay un amplio despliegue operativo del Ejército, de la Policía Federal, Policía del Estado, que protege a la población de los actos de inseguridad que plantea la delincuencia”.

A pesar de que la percepción ciudadana es de que la violencia está desbordada y que ha rebasado a las autoridades, el funcionario sostuvo que estos momentos en algunos lugares está acotada, como Chilapa”.

Reiteró que en ese municipio “hay un enfrentamiento entre los dos grupos delictivos –la semana pasada dijo que había un tercer grupo criminal peleando por la plaza—, hay un operativo en marcha de 500 militares, 100 policías del estado que han logrado proteger a la población”.

Aceptó sin embargo que ese operativo “no ha reducido este enfrentamiento entre las bandas delictivas, que han llevado a cabo sus actos ilícitos como arrojar bolsas con cuerpos desmembrados en horas de la madrugada, en caminos no muy transitados”.

El vocero señaló que en esos lugares se esconde la delincuencia y no en las ciudades, “la población está protegida, no hay tiroteos en las calles, no hay actos de ese tipo, lo que hay es un enfrentamiento en las penumbras, en la oscuridad, de estos grupos que se enfrentan por asuntos propios de la delincuencia, la violencia está acotada en esos lugares” y descartó que haya un toque de queda en esos lugares impuesto por los criminales.