* Al magistrado presidente Robespierre Robles “es más fácil que lo encontremos en Facebook que en su oficina”, aseguran empleados que exigen mejoras laborales

 

 

Jesús Saavedra

 

Trabajadores sindicalizados del Poder Judicial realizaron una protesta para exigir que se acabe el rezago salarial, se establezca un fondo de retiro, una caja de ahorro y se acabe el nepotismo e influyentismo en la entrega de plazas de trabajo.

Este martes, agremiados al Sindicato de Servidores Públicos del Poder Judicial del Estado de Guerrero se reunieron afuera de las instalaciones de la Ciudad Judicial, al sur de esta capital, para iniciar una protesta donde exigieron una audiencia con el presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Robespierre Robles Hurtado, de quien dijeron “es más fácil que lo encontremos en Facebook que en su oficina”, dijo una proyectista muy molesta.

El secretario general de ese sindicato, Adalberto Valenzo Martínez recordó que hace dos años realizaron un paro de labores que se extendió durante dos meses y “pensamos que había sido suficiente para hacer cambios fundamentales y respetar los derechos laborales de la institución, para dar un servicio de impartición de justicia de mejor calidad, más profesional” a los guerrerenses.

Se quejó porque a año y medio de haber tomado posesión Robles Hurtado como presidente del TSJ, a los trabajadores de ese poder se les siguen violando “sistemáticamente los derechos laborales, no han cambiado las cosas, y si han cambiado ha sido para empeorar”.

Recordó que el notario público y actual magistrado se comprometió públicamente a “que una de sus prioridades serían los trabajadores; estamos en abril y a la luz de un pliego petitorio laboral de rezago salarial, de la petición de un fondo de ahorro, de un fondo de retiro, de un servicio profesional de carrera”.

Valenzo Martínez afirmó que “hay una actitud de cerrazón del magistrado que cree que con cerrar los ojos y los oídos” se resuelven los problemas; “siguen las condiciones para protestar al máximo, nos quieren provocar para iniciar un paro similar, hemos dicho que no vamos a caer en la provocación, hemos elegido un camino más lento, pero más legitimado, no seremos quienes generemos una parálisis en el Poder Judicial”.

Aseveró además que Robles Hurtado ha dado “instrucciones a sus jueces, magistrados y consejeros de la Judicatura, para que de manera cobarde hagan actos de represión para que no se manifiesten, asumimos esta denuncia pública y vamos a continuar a pesar de las amenazas y lo que impliquen”.

Dijo que Robles Hurtado “nos ha querido tildar de rencorosos y de generar odio; no señor no tenemos odio, nos asiste la razón y la justicia, queremos que haya un bienestar para nuestras familias, no hay incremento salarial desde hace cuatro años, vamos a pedirle que nos atienda que resuelva el petitorio laboral”.

Dijo que “reiteramos el llamado a Robespierre le cumpla a los trabajadores del Poder Judicial”, y acusó que desde que asumió el cargo “se ha limitado a sobrellevar” los problemas, además que “la mentira y la frivolidad son el ciclo de su administración. Es un notario habilitado de magistrado”, agregó.

Finalmente aseguró que en el TSJ se sigue presentando el nepotismo e influyentismo en el otorgamiento de plazas de trabajo y “en la práctica no hay un sistema de carrera judicial, los consejeros y el presidente se niegan a reglamentar debidamente el servicio profesional de carrera y a poner en práctica a los principios de la carrera judicial, para poner en práctica concursos de oposición para evaluar a los aspirantes en sus méritos y capacidades”.

Señaló que los nuevos funcionarios del Poder Judicial son nombrados “por tener una relación personal o de familiaridad con los consejeros de la judicatura, con magistrados o con jueces, esa práctica perjudica a los trabajadores que hacen méritos y tienen capacidades, perjudica a la sociedad porque esas personas no prestan un buen servicio”, finalizó.