* El coordinador general de Protección Civil en Acapulco, Sabás Arturo de la Rosa informó que en las últimas valoraciones se arrojó que son más de 71 hectáreas afectadas
ANA LILIA TORRES
ACAPULCO.— El coordinador general de Protección Civil en Acapulco, Sabás Arturo de la Rosa Camacho informó que luego del incendio que se presentó el fin de semana pasado en el Parque Nacional El Veladero, instalarán vigilancia por parte del Ejército y Policía Ecológica para evitar que se invadan los terrenos de la zona siniestrada.
De la Rosa Camacho informó que las valoraciones hechas en la parte alta de las colonias María de la O, Morelos, Palma Sola, Santa Cruz y Santa Cecilia arrojaron que son más de 71 hectáreas las que fueron arrasadas por el fuego.
En entrevista, el funcionario estatal señaló que a raíz de un segundo incendio que se presentó el lunes pasado en El Veladero, autoridades de los tres niveles de gobierno acordaron iniciar labores de reforestación inmediata en ese lugar, ya que quedó libre de maleza y puede ser aprovechado por líderes invasores para ocupar esos terrenos.
El área del Parque Nacional El Veladero es una de las zonas de la ciudad con mayor número de asentamientos humanos irregulares, fomentados por décadas por partidos políticos.
De la Rosa Camacho dijo que tras los incendios de inmediato se tomaron medidas ante la posibilidad de que aumente este fenómeno ahora que la zona quedó despejada de maleza por la conflagración y pueda llegar gente a establecerse en forma ilegal.
El funcionario indicó que además es necesario que las dependencias federales como Semarnat, Profepa y Semaren, colaboren con el programa de reforestación que se planea llevar a cabo en ese lugar, para contribuir precisamente a evitar nuevas invasiones en El Veladero.
En el caso de las afectaciones, mencionó que el incendio perjudicó severamente la tierra porque quedó calcinada totalmente y se perdió toda la flora y fauna que había en ese lugar, pero que ahora la prioridad es proteger dicho lugar, para evitar que sean invadidas las tierras que se encuentran completamente despejadas de maleza.