* El ex procurador de Justicia criticó la frivolidad del presidente y señaló sus principales fracasos al mando del gobierno de México
Alondra García
El ex procurador de Justicia de Guerrero, Alberto López Rosas, criticó la “frivolidad” del presidente Enrique Peña Nieto y advirtió que incluso los priístas le darán la espalda antes de que termine su sexenio.
“La frivolidad va envuelta en papel celofán y a veces la envoltura es más llamativa que su contenido. Así parece haber ocurrido con el gobierno de Enrique Peña. Se mostró en fina envoltura, se desenvolvió el contenido y se descubrió la frivolidad que ha caracterizado sus años de gobierno”, expuso el también ex candidato a la gubernatura.
Señaló los principales fracasos del gobierno de Peña, que lo han posicionado como el presidente más impopular de los últimos tiempos.
Su administración, dijo, es reprobada por el 80 por ciento de la ciudadanía y apenas el 20 por ciento de los mexicanos lo aprueban.
“No es un buen balance a dos años de que concluya el gobierno de la República, con un dólar que fluctúa entre 20 y 22 pesos, un crecimiento interno de apenas dos por ciento anual, unas reservas monetarias castigadas por el endeudamiento interno y externo, un desprestigio internacional, un alto índice de desempleo, incremento en el precio de los hidrocarburos y como consecuencia, un aumento en los artículos de consumo básico, así como una violencia generalizada en el país”, puntualizó el político guerrerense.
Respecto a los cambios en el gabinete federal, consideró que estos revelan una “inminente” división en el PRI.
López Rosas señaló que el PRI es “el único apoyo político” con el que cuenta Peña Nieto. Por ello, consideró que su decisión de reincorporar a Luis Videgaray Caso a la administración federal vendrá a quebrantar aún más al dividido partido tricolor.
De acuerdo con López Rosas, el presidente Enrique Peña “está perdiendo el control en la sucesión presidencial” y el PRI “se desarticula cuando no tiene la línea de un mandatario con poder y control en los líderes sectoriales del partido”.
“El horno no está para bollos”, advirtió López Rosas. También consideró que el presidente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, está arrebatándole a Peña Nieto el dominio del partido.
“No se puede dudar de la debilidad del habitante de los Pinos. Esa debilidad es la porosidad por donde puede ser rebasado y quedarse en estado de indefensión ante los priistas que ven una debacle en su gobierno. La fortaleza política que obtuvo al haber devuelto al PRI al poder, hoy es debilidad”, expuso.
Recordó que la “frivolidad” que ha caracterizado a Peña Nieto también la comparte el ahora secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, “quien lo llevó al desatino de recibir a Donald Trump”.
Para López Rosas, aunque Donald Trump ganó las elecciones, “eso no quita la irritación de los mexicanos al haber abierto la residencia oficial a quien detesta, ofende, denigra a los nacionales”.
Bajo dicho argumento, consideró que “no será la oposición quien le reclame” al mandatario mexicano.
“Basta con sus propios correligionarios. Tal vez no alcance el papel celofán para enviarle envueltos sus reproches”, sentenció.