* Silvano Blanco, exalcalde de ese destino turístico, acusó que fueron los gobiernos municipales del PRI los que descuidaron la seguridad en ese municipio
Alondra García
El presidente de la Comisión de Desarrollo Económico del Congreso de Guerrero, Silvano Blanco Deaquino, informó que en los próximos días promoverá un exhorto dirigido al fiscal general Xavier Olea Peláez y al gobierno estatal, para que atiendan la problemática de inseguridad y violencia que padece el puerto turístico de Zihuatanejo.
En entrevista con El Sol de Chilpancingo, el legislador y ex alcalde de Zihuatanejo aseguró que dicho municipio sí enfrenta una crisis en materia de seguridad debido a la operación de grupos del crimen organizado.
Además, responsabilizó de esta crisis a los gobiernos priístas que le sucedieron en el gobierno municipal, puesto que descuidaron el rubro de seguridad pública y extraviaron los recursos destinados para atender esta materia.
Silvano Blanco recordó que cuando él estuvo al frente de la alcaldía de Zihuatanejo se impulsaron diferentes acciones para “contener a estos grupos” de la delincuencia organizada, como la instalación y puesta en operación del Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo (C4).
“Instalamos cámaras de video vigilancia que posteriormente se dejaron de operar, no se trabajó; los policías tenían suficientes municiones y armamento nuevo. En ese entonces se contuvo el problema de la inseguridad en el municipio”, destacó el exalcalde.
Recordó que a su salida de la administración, ocupó el cargo el priísta Alejandro Bravo Abarca, quien dejó un desfalco millonario en el municipio, y después le siguió el también priísta Eric Fernández Ballesteros, quien también dejó una deuda millonaria, obras sin comprobar y una crisis en diferentes dependencias municipales.
Para Blanco Deaquino, los gobiernos priístas que le sucedieron fueron los responsables de que la inseguridad escalara hasta el punto en que se encuentra en este momento.
Advirtió que de seguir la escalada de violencia, Zihuatanejo podría llegar a los niveles del puerto de Acapulco, que ya es considerada la ciudad más violenta del país y la cuarta más violenta del mundo.
El diputado de Movimiento Ciudadano también lamentó la actuación del fiscal general del estado, Xavier Olea Peláez, quien la semana pasada declaró ante los medios de comunicación que la protesta de empresarios de Zihuatanejo para demandar paz y seguridad fue una medida “exagerada”, bajo el argumento de que la situación no es tan complicada en dicho municipio.
“Claro que la situación es complicada, todos los sabemos, todos sabemos cómo está Zihuatanejo y los empresarios lo han padecido mucho, los robos, los secuestros, las extorsiones, el cobro de piso. Claro que hay un impacto en la economía, claro que hay afectaciones graves”, expresó Blanco Deaquino.
Por ello, informó que esta semana presentará un punto de acuerdo en el Congreso de Guerrero para exhortar al fiscal general del estado y al gobierno de Guerrero a realizar las acciones necesarias para garantizar la paz y la seguridad de los habitantes, empresarios y visitantes de Zihuatanejo.