* La Fiscalía presentó las pruebas y testimonios en contra de quienes asaltaron y mataron a dos normalistas, a un maestro y a un chofer durante el violento atraco a pasajeros de una camioneta del servicio público, la semana pasada
Jesús Saavedra
El juez de control del distrito judicial de Bravos, Celso Ubaldo de la Sancha, dictó un auto de vinculación a proceso a cuatro de los cincos detenidos por la Fiscalía del Estado como presuntos responsables del asesinato de los normalistas de Ayotzinapa, Jonathan Morales Hernández y Filemón Tacuba Castro; del maestro Juventino Carranza Tejacal y del transportista Marco Antonio Organista Lorenzo, ocurridos durante un asalto a una urvan del servicio público.
Este jueves, el juez encabezó una audiencia para definir la situación legal de Ismael Domínguez Ibáñez, José Antonio Solano Morales, Israel Millán Portillo y Carlos Pérez Navarro, quienes fueron detenidos el fin de semana como presuntos responsables de haber asesinado a esas cuatro personas en mención, el pasado martes 4 de octubre.
Esos hechos ocurrieron en la carretera federal Chilpancingo-Tixtla, cuando de acuerdo a los testimonios que este jueves se conocieron seis personas abordaron una urvan del servicio de transporte público en el crucero de la Indeco; tres se subieron en la primera fila de los asientos del conductor y los otros tres en la última fila de la unidad; cuando la unidad había avanzado, los sujetos sacaron unas armas y dispararon para detener la unidad para despojar a los demás pasajeros de sus pertenencias.
De acuerdo con los testimonios integrados en la indagatoria y que se dieron a conocer en la sala de juicios orales de esta capital, los seis asaltantes bajaron a las personas que viajaban en la urvan y los asesinaron; a los dos normalistas los ultimaron con tiros en la cabeza y a una tercera persona, Juventino Carranza Tejacal, también.
Posterior a esos hechos, los presuntos asaltantes huyeron hacia la colonia Nueva Revolución en las inmediaciones de Casa Guerrero, donde asesinaron a otra persona, Marco Antonio Organista Lorenzo, chofer de otra Urvan del servicio de transporte público.
Posteriormente, las seis personas huyeron a bordo de un automóvil que habían interceptado en esa zona y que obligaron al chofer a huir hacia la colonia Sección Séptima, donde finalmente lograron evadir a la policía, de acuerdo a la relatoría de hechos que concatenó la Fiscalía del Estado y que presentó como pruebas este jueves en la audiencia.
Por esos hechos, la Fiscalía detuvo y puso a disposición del juez a cuatro personas (una más por ser menor de edad será juzgado a través del sistema de justicia para menores), quienes no emitieron declaración alguna por los hechos que se les imputan, que son cuatro asesinatos por esos hechos del martes 4 de octubre, aunque la Fiscalía pretende vincularlos con nueve homicidios más ocurridos en otros asaltos violentos en esta capital.
En esta nueva modalidad de impartición de justicia en los juicios orales, las víctimas del delito y los presuntos responsables del delito estuvieron presentes en la audiencia, en el primer caso a través de la Fiscalía, que imputa los cargos y dos abogados que son asistentes de las víctimas, y por otro los cuatro acusados y sus abogados, que en este caso son los defensores de oficio.
Durante la audiencia realizada en la sala de juicios orales no se permite tomar fotos, videograbaciones o anotaciones.
Asistieron como abogados de las víctimas de los dos normalistas de Ayotzinapa, Vidulfo Rosales Sierra, y otro abogado que representa a la familia del transportista Marco Antonio Organista Lorenzo.
En el procedimiento jurídico, los abogados de la Fiscalía dieron lectura al pliego de acusaciones contra los cincos detenidos y las pruebas que presentaron para vincularlos a esos asesinatos, entre los que se encuentran los testimonios del chofer de la urvan y del conductor del automóvil que interceptaron en las inmediaciones de la colonia Nueva Revolución, quienes identificaron a los detenidos como los responsables de esos hechos.
Además, se mostró el peritaje que concatena los cascajos encontrados en la carretera a Tixtla y la colonia Nueva Revolución, que pertenecen a calibre 9 milímetros y .22, que coinciden con las dos armas que les encontraron en su poder a los detenidos.
La Fiscalía y los abogados de las víctimas pidieron al juez que se dictara vinculación a proceso por estos asesinatos a los implicados, e incluso el abogado Vidulfo Rosales pidió que fuera por el término de “premeditación”, por la forma de actuar de los detenidos y también que se vinculará al caso las tomas de una cámara de vigilancia del crucero de la colonia Indeco que identifican a los cuatro detenidos.
Los abogados defensores decidieron no impugnar en la audiencia las imputaciones de la Fiscalía y se reservaron el derecho de sus defendidos a decir algo “por estrategia”, en tanto el juez solicitó a los familiares de las víctimas fijar una postura, lo que declinó hacer el hermano del normalista Jonathan Morales Hernández.
Sin embargo, el papá del transportista Marco Antonio Organista Lorenzo pidió la palabra y con voz entrecortada pidió que las instituciones encargadas de impartir justicia “no se correo corrompan” y que se castigue conforme a derecho a los presuntos autores de estos crímenes.
“A lo mejor a ustedes no les enseñaron a respetar, les pido que no sigan haciendo nada mal, que no sigan enlutado familias, porque lo que hacen no es nada bueno; han dejado a dos huérfanas sin su padre que ¡Dios los perdone!”, dijo el señor.
Enseguida los abogados de la Fiscalía pidieron que la etapa de la investigación se cierre en tres meses, a lo que el juez accedió con el objetivo de iniciar el juicio, que ahora corresponderá a tres jueces desahogar y determinar su culpabilidad o inocencia, y si fuese el caso en el primer supuesto dictar una sentencia.