* Comunitarios por la Paz y la Justicia dan 48 horas a las autoridades para que encuentren a un joven que desapareció el fin de semana pasado o regresarán armados a la cabecera municipal
ALONDRA GARCÍA
CHILAPA.— El grupo Comunitarios por la Paz y la Justicia, el mismo que en mayo de 2015 sitió Chilapa durante 5 días, dio un ultimátum de 48 horas a las autoridades para que localicen a un joven desaparecido desde el sábado 17 de septiembre, o de lo contrario volverán a incursionar en esa ciudad.
“Si en 48 horas no lo encuentran, vamos a tomar medidas drásticas. Vamos a bloquear carreteras y a sitiar Chilapa”, advirtió Tranquilino Tranqueros, presidente de la organización comunitaria.
Desde el domingo 18 de septiembre, los policías comunitarios que operan en la zona rural de Chilapa amagaron con ingresar a la cabecera municipal.
El motivo, según explica Tranquilino Tranqueros, es la reciente desaparición y posterior asesinato de tres hombres de una misma familia.
Las tres víctimas eran habitantes de la comunidad de Buena Vista del Río, ubicada a dos horas y media de Chilapa, y formaban parte de la policía comunitaria.
De acuerdo con las versiones de los pobladores, el miércoles 10 de agosto, el padre y sus dos hijos salieron de Buena Vista del Río con dirección a la ciudad de Chilapa para realizar algunos mandados.
Sin embargo, su familia se preocupó porque ese día ya no regresaron. Sus cuerpos fueron localizados al día siguiente, el jueves 11 de agosto, en la localidad de Xochimilco, ubicada a 10 minutos de la ciudad de Chilapa.
Más recientemente, el sábado 17 de septiembre, desapareció el joven Gerónimo Rosario Tecorral, quien también forma parte de la policía comunitaria.
El joven salió de su hogar, en la localidad de Colotepec, con dirección a la ciudad de Chilapa. Desde entonces no se supo más de él.
“No hemos sabido nada, no hay respuesta de las autoridades. Pensamos que fue levantado por la delincuencia organizada y por eso nos estamos manifestando”, señaló Tranquilino Tranqueros.
A pesar de que varios policías comunitarios y habitantes de la zona rural permanecieron durante tres días en las entradas de la ciudad, Tranquilino Tranqueros aclaró que no tienen intención de ingresar a Chilapa, pues no quieren “provocar molestias en la ciudadanía”.
Ayer al mediodía, los comunitarios y habitantes rurales que se mantenían en la Glorieta de los Ajos y en el crucero de Ayahualulco se retiraron a sus localidades.
Tranquilino Tranqueros explicó que emprendieron la retirada luego de entregar un oficio en el que solicitan la búsqueda del joven desaparecido, tanto al Ejército como a la Fiscalía General del Estado.
Sin embargo, advirtió que “si en 48 horas” no encuentran al joven desaparecido, están dispuestos a tomar “medidas drásticas”, como bloquear carreteras y sitiar la cabecera municipal de Chilapa, tal como hicieron entre el 9 y el 14 de mayo de año pasado.
El presidente de los Comunitarios por la Paz y la Justicia detalló que cuentan con una fuerza de 800 policías comunitarios, quienes operan en 76 comunidades de los municipios de Chilapa y Zitlala. “Nos levantamos en armas para defendernos de la delincuencia organizada”, explicó Tranqueros.
Comentó que la desaparición de personas de la zona rural de Chilapa es frecuente, debido a que son interceptados por integrantes de grupos criminales cuando bajan a la cabecera municipal para vender sus productos, a realizar trámites o hacer compras.
Recordó que uno de los desaparecidos es su padre Toribio, quien fue ‘levantado’ en febrero de 2015 y desde entonces se desconoce su paradero.
De acuerdo con Tranquilino Tranqueros, las autoridades nunca hicieron el intento de buscarlo y tampoco les han presentado avances en el caso a un año y medio de su desaparición.
“Nosotros no tenemos ni idea de quién o qué grupo criminal es el culpable de las desapariciones y asesinatos, pero aquí la responsabilidad la tienen las fuerzas armadas, porque mientras están concentrados en los módulos a las salidas de Chilapa, la delincuencia está instalada en el centro de la ciudad”, sentenció el presidente de los pueblos organizados en la policía comunitaria.