ANA LILIA TORRES/MARTÍN BASURTO

 

 

ACAPULCO. — En medio del ambiente de psicosis que se vive en Acapulco, por los hechos violentos ocurridos la noche del  domingo, este martes trabajadores de las oficinas del Servicio de Administración Tributaria (SAT), ubicadas en la calle Anton de Alaminos del fraccionamiento Magallanes, fueron desalojados por una falsa amenaza de bomba.

El personal fue evacuado alrededor de las 10:40 de la mañana de ayer, luego de recibir una llamada telefónica, advirtiendo la presencia de un aparato explosivo en el interior del inmueble, lo que provocó escenas de nerviosismo entre los trabajadores y contribuyentes que realizaban trámites fiscales.

Los directivos y jefes de área instruyeron al personal a salir de las instalaciones y dieron aviso a las autoridades, solicitando su auxilio, ante el temor de que fuera real la amenaza de bomba dentro de su centro de trabajo.

El hecho provocó una intensa movilización de elementos de la Policía Federal, Gendarmería y Ejército Mexicano, quienes ingresaron al inmueble en busca de supuesto material explosivo y acordonaron la zona para evitar el paso de transeúntes y vehículos.

Los directivos y trabajadores del SAT estuvieron replegados por más  de dos horas en cafés y negocios de las en áreas cercanas a las oficinas, que se ubican a unos metros de la costera Miguel Alemán.

Autoridades de Protección Civil informaron que como medida preventiva se tuvo que evacuar a 250 personas de las oficinas del SAT, entre personal y usuarios contribuyentes, para mantenerlos a salvo de cualquier percance.

Fue cerca de la una de la tarde, cuando los encargados de hacer la inspección, informaron a los trabajadores que podían ingresar, dado que no hallaron ninguna bomba.

Todo se trató de una falsa alarma, generada en medio de la psicosis que viven los acapulqueños por las balaceras del domingo pasado, cuando delincuentes atacaron bases de la Policía Federal, en Caleta y Costera, con saldo de un maleante muerto y un agente herido.