* El cuerpo fue encontrado este domingo con 3 balazos en la espalda y un mensaje; tenía 12 días privado de su libertad y trasciende que su familia pagó un millón de pesos a los plagiarios

 

Redacción

 

El cuerpo sin vida del expresidente municipal de Cualac, Rolando Sánchez Sosa –quien fue secuestrado hace 12 días y cuya familia habría pagado un millón a los plagiarios—, fue encontrado este domingo a un costado del río Petlacala a orillas de la carretera de terracería que conduce al poblado de la Soledad, en la región de la Montaña.

Diversas agencias coinciden en que la policía municipal de Tlapa recibió alrededor de la una de la tarde de este domingo, informes de que en el sitio ya mencionado estaba tirado el cuerpo sin vida de un hombre, por lo que los elementos acudieron al lugar para verificar la información.

Media hora después, los uniformados y personal del Servicio Médico Forense llegaron al lugar y localizaron el cuerpo sin vida de un hombre que vestía una camisa color gris y pantalón de mezclilla color azul cielo, botas color café, de aproximadamente un metro 65 centímetros de estatura y 40 años de edad, a quien se le apreciaban tres impactos de bala en la espalda y que tenía una cartulina con un mensaje escrito: ATENTAMENTE LA LEGIÓN.

El personal del Semefo que hizo en levantamiento cadavérico trasladó el cuerpo de Sánchez Sosa, en calidad de desconocido, a sus instalaciones, donde más tarde se presentó la señora María Esther Ortega Guzmán, quien dijo ser la esposa del exalcalde de Cualac.

La ahora viuda iba acompañada por unas quince personas de su municipio, quienes la apoyaron en la diligencia ante las autoridades, para después trasladar los restos mortales del político a su lugar de origen a bordo de una camioneta Nissan color gris con camper negro de un servicio funerario.

Sánchez Sosa estuvo al frente de la administración municipal en el periodo 2008-2012. Era ingeniero de profesión y era propietario de una empresa extractora de materiales pétreos ubicada sobre el río Tlapaneco, en el municipio de Huamuxtitlán.

Fue secuestrado por un grupo de hombres armados durante la noche del pasado 29 de marzo, cuando se trasladaba del municipio de Huamuxtitlán hacia su domicilio en la cabecera municipal de Cualac, a bordo de una camioneta Ford tipo Lobo blanca.

Trascendió que durante varios días sus familiares habrían intentado negociar con los secuestradores la libertad de Sánchez Sosa y que incluso habrían pagado cerca de un millón de pesos, pero esto no ha sido confirmado.

Hasta las 10 de la noche de ayer, ninguna autoridad había confirmado oficialmente esta información.