Caer de gracias políticas
Noé Mondragón
Al exdiputado federal perredista y actual funcionario del gabinete astudillista, Jorge Salgado Parra, lo atosigan con fuerza los tiempos políticos. No digiere la idea de renunciar a la candidatura priísta a la alcaldía de Chilpancingo, para la elección de julio de 2018, pese a que los tiempos y las circunstancias lo ubiquen fuera de ella. Además, Jorge trata de moverse en el ámbito de la polémica con el fin de atraer los reflectores mediáticos. Pero lo ha hecho mal. Sin apoyos políticos externos fuertes, revela el grado agudo de su vulnerabilidad. Es cuestión de asomarse a varios eventos recientes para entender su notable desesperación.
FUERZA POLÍTICA AGOTADA.- Para muchos prominentes miembros del grupo político aguirrista, su fuerza menguó sustancialmente, a la par del propio declive político del exgobernador perredista. Entre ellos destacan con fuerza dos: el senador Sofío Ramírez Hernández y el exdiputado federal y actual titular del Instituto Estatal para la Educación de Jóvenes y Adultos de Guerrero (IEEJAG), Jorge Salgado Parra. De ahí se desprenden las lecturas: 1.- El premio político para este último personaje, por haber cambiado sus apoyos en la coyuntura de la pasada elección de gobernador, fue la titularidad del IEEJAG. Pero resulta poco probable que el gobernador Héctor Astudillo, lo provea de más oxígeno político, una vez cumplido dicho compromiso. Y Jorge tendrá que aprender a remar otra vez, desde cero. O de plano, a colapsar su efímera carrera política. 2.- Una de las vertientes en las que se ha instalado, es el escándalo malo. Primero, tuvo diferencias con el anterior titular, el también aguirrista José Villanueva Manzanarez, por los adeudos financieros heredados. Y recientemente, fue señalado como uno de los personajes que atacaron en redes sociales, a un presunto delincuente recientemente capturado y que pertenecía a la banda de Los Rojos. Desde luego, Salgado Parra negó todo. Hasta conocerlo. Pero lo único cierto es que el escándalo malo comienza a inocularlo. Y de ahí ya no hay reversa para los escenarios de desastre que se le están acumulando. 3.- El IEEJAG no es del todo negativo. Su presupuesto permite ciertas operaciones y movilidades. Pero Salgado Parra tiene enfrente mucha competencia por la alcaldía de Chilpancingo, su sueño político dorado. Destacan el diputado local, Ricardo Moreno Arcos. Y la diputada federal tricolor Beatriz Vélez Núñez, entre los mejor posicionados. En segundo plano y con menor fuerza, aparecen los diputados locales Víctor Manuel Martínez Toledo y Alicia Vargas. Además, el oxígeno político no le alcanza para repetir otra vez en la diputación local o federal. Y de no dársele, es poco probable que las tribus en el PRD lo rescaten de nueva cuenta y lo reafilien a ese partido. Jorge Salgado no está todavía en la lona política, pero es evidente que va cayendo. No solo del PRI, de los priístas, de los arreglos en lo oscurito y de las preferencias ciudadanas; sino también de la gracia política del exmandatario estatal, Ángel Aguirre. Ese es el punto.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Como para meterle ruido a la coyuntura y no dejar caer la polémica, la secretaria general del PRD, Beatriz Mojica Morga, se puso en un plan retador, respecto del gobierno estatal tricolor. Le pidió a Héctor Astudillo, “poner orden” en la entidad ante la gran cantidad de muertos y los secuestros masivos. Pero consciente de que no ha hecho las cosas bien, el mandatario estatal se bajó del ring. Alegó en su defensa que “no le entraría a las confrontaciones”. Pero lo cierto es que la entidad sigue ardiendo. Y los bomberos no aparecen por ningún lado.