* Damnificados se manifiestan en la Sedatu; denuncian que personas ajenas se apoderan de sus viviendas y nadie interviene

 

Juan José Romero

 

Damnificados por la tormenta “Manuel” y el huracán “Ingrid”, protestaron en las oficinas de la delegación de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), para que les ofrecieran una explicación del por qué personas ajenas se están posesionando de las viviendas que el gobierno federal les regaló.

Un grupo de 50 personas molestas llegaron a las instalaciones ubicadas en el paseo “Alejandro Cervantes”, pidiendo hablar con el delegado o algún funcionario, pues en días pasados fueron citados para una reunión para ver el problema de invasión de casas.

Sin embargo, los guardias no los dejaron pasar, incluso colocaron una cadena con candado a la puerta para impedir el paso a los inconformes, mientras que trabajadores de las dependencia miraban desde un tercer nivel la protesta.

Los manifestantes señalaron que desde hace varios días personas ajenas han estado llegando por las noches a posesionarse de algunas viviendas, pese a que muchas de ellas, sus propietarios ya cuentan con llaves, sin embargo, ahora ya no pueden entrar porque la vivienda está ocupada por otros.

Hace algunos días el delegado de Sedatu, José Manuel Armenta Tello reconoció que casos como este ya se habían presentado en Chilpancingo y Acapulco, por lo que la dependencia había interpuesto denuncias ante la Procuraduría General de la República (PGR), para que investigara estos casos.

“Ya tenemos vivienda asignada, pero la gente de El Mirador alega que están usurpando nuestro lugar que el mismo Sedatu les vendió y ahora Sedatu no da la cara”, dijo unas de las afectadas.

En tanto otros se quejaron que en algunos casos la dependencia entregó llaves de las viviendas, “ellos entregaron casas a personas que ya están ocupando otras y no se vale, aquí está uno de los señores que su casa ya la están ocupando y todo”, dijo otra inconforme.

Insistieron en que funcionarios de la dependencia se comprometieron para darle una solución a esta situación, sin embargo, al momento de la protesta nadie los atendió para solicitar el desalojo de quienes ya se apropiaron de las viviendas de El Mirador, ubicado al sur de la capital.

“Un maestro fue a agarrar hasta tres casas, y no se vale, son gente que no, ellos no ponen orden para ir a ver, a ver señora enséñeme su folio, sino afuera, y no pues no se vale, según nos van a dar una constancia que nos acredita como dueños, propietarios para que nos respaldemos en algo y no nos han dado nada”, comentaron.

Recordaron que algunos ya ocupan sus viviendas, sin embargo a  una parte sólo les dieron las llaves y ahora no pueden ocuparlas “porque hay fulanos ocupándolas”, e ignoran de qué organizaciones son.

El enojo de los vecinos por momentos se tornó con intenciones incluso de brincarse la reja para poder entrar a la Sedatu, sin embargo no pasó a mayores, pero advirtieron que regresarán cuantas veces sea necesario para ser atendidos, de lo contrario advirtieron, podría suscitarse un enfrentamiento entre vecinos de ese asentamiento. (Notymás)