Habrá Mando Único

 

Félix J. López Romero

 

La alta violencia que se ha desatado en la entidad ha obligado al gobierno estatal al establecimiento del Mando Único policiaco, con el específico fin de darle combate decisivo, ante su notable incremento: de manera colateral la disposición de ponerla en práctica obedece al crimen de la alcaldesa de Temixco, Morelos, Gisela Mota Ocampo, quien fue asesinada por un grupo de sicarios en el interior de su domicilio particular.

El gobernador Astudillo Flores al reunirse con miembros de su gabinete, los apresuró para que en un lapso no mayor a los 6 meses, los diferentes cuerpos policiacos existentes sean adelgazados, quedando sólo uno que se encargará del mando general, instruyendo para el caso al secretario de Seguridad Pública, para que elabore un proyecto para el propósito deseado.

Tiempo atrás, cuando se anunció la creación del mando único, hubo resistencias en algunos Ayuntamientos, cuyos titulares rechazaron la idea, manifestando que sus respectivos cuerpos policiacos estaban preparados para hacerle frente a la delincuencia, demostrándose en la práctica que no era así. Esto ha venido a apresurar lo que se tiene pensado, porque los hechos de violencia, en lugar de ir a la baja, han aumentado.

En los seis meses en que podrá establecerse en mando único, deberá reformarse la Ley del Municipio Libre, para legitimar lo que se tiene proyectado llevar a cabo. Aun cuando el anuncio es reciente, en gobierno estatal espera que los Ayuntamientos colaboren en su aplicación, porque el alto índice delincuencial así lo requiere. Las cosas deben suavizarse para que suceda lo que en el vecino estado de Morelos, en donde este anuncio ha ocasionado un desencuentro entre el alcalde de Cuernavaca con el gobernador de esa entidad. Como hablando se entiende la gente, a través de un diálogo franco y sincero, podrá establecerse aquí el mando buscado.

 

Amenazas de la CETEG

 

Por el hechos de que la Secretaría de Educación Pública (SEP) está realizando descuentos salariales a maestros de la Ceteg, quienes se resisten a retornar a las aulas, luego de varios meses de holganza, poniendo como pretextos para no hacerlo estar en contra de la evaluación, rechazando de paso la reforma educativa impulsada por el gobierno federal, la lideresa de una fracción de ese organismo, Antonia Morales Vélez, amenazó con el reinicio de protestas si se continúa con descuentos de docentes, quienes desde hace varios meses están en paro, dejando sin clases a miles de niños en diversas regiones de la entidad.

Es un descaro de quienes exigen pagos sin desquitarlos; se le debe retribuir a quien cumple sus compromisos, quienes no, deben de ser dados de baja por incumplir con sus obligaciones.

Independiente a no laborar desde hace meses, los cetegistas también están exigiendo la aparición con vida de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, cuyo paradero continúa siendo un misterio, aun cuando lo más probable es que hayan sido ultimados por un grupo delincuencial, que se ha atribuido tal hecho.

Si los maestros no quieren retornar a sus respectivos centros escolares, la SEP debe cesarlos llamando en sustitución a normalistas recién salidos de las aulas, quienes están deseosos de obtener una plaza; de tal manera se daría solución al problema, porque después de todo no es la Ceteg la que tiene el contrato colectivo de trabajo con la SEP, sino el SNTE que reclamaría para sí las plazas en manos de maestros beligerantes.

 

Servicios deficientes

 

Por los festejos navideños el Ayuntamiento ha pasado por alto la obligación de prestar eficientes servicios públicos, porque cae en la esfera de sus responsabilidades ofrecerlos de la mejor manera, ya que los ha centrado en atender todo lo que ocurre en la feria navideña, la cual tocó a su fin sin que por fortuna tuvieran hechos que lamentarse.

Para las autoridades locales pareciera que las fiestas de fin de año era lo único que le importara salieran bien, porque por ellas se desatendieron servicios públicos, destacando entre otros los relativos a la recolección de la basura y la dotación de agua potable.

El gobierno municipal se queja de tener un parque vehicular escaso para ofrecer un buen servicio; lo mismo ocurre con el agua potable que cada día llega más escasa a los hogares. En ambas cosas se dice que mejorará, siendo una promesa que hasta ahora no se cumple.

En el caso de la basura hay particulares que ofrecen este servicio, siempre bajo amenaza de ser retirados, cuando es necesaria su participación para tener una población con un mejor aspecto; en el caso del agua, numerosos vecinos han taponeado las calles, presionando de tal manera a las autoridades para tenerla en sus hogares.

Los mercados públicos son poco menos que un desastre, porque quienes se dedican a las tareas mercantiles expenden sus productos en las calle, haciendo difícil la circulación vehicular. A los agentes de Tránsito, en lugar de cumplir con su tarea, se les puede mirar platicando, dejando al margen la tarea que deben desempeñar.

Hasta hoy el alcalde Marco Antonio Leyva Mena no ha demostrado ser un buen administrador, porque todos se brincan sus trancas sin que se mire energía en su mandato.