Temas cotidianos

Por Félix J. López Romero

 

Reconstruir el tejido social para el retorno de la tranquilidad

 

Ha sido bien recibida por la grey católica, la propuesta por sus más altos prelados, en el sentido de poder dialogar con los delincuentes, para encontrar la paz y tranquilidad que tanto se requiere, poniendo de tal manera un alto a la violencia que parece no tener término. Los obispos están de acuerdo en abrir un diálogo con los delincuentes, para de tal manera reducir la inseguridad que se vive.

Nadie debe cerrar los ojos al diálogo, el que pondría fin a los duros días por los que se atraviesa; de tal manera podrá recomponerse el tejido social, el que está gravemente dañado, de acuerdo a la perspectiva del arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, proponiendo además la creación de una gran plataforma social, la que tenga como único propósito recomponer las cosas, porque los criminales también son ciudadanos.

En tanto el obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, se mostró partidario de entablar pláticas con los grupos criminales, pudiendo ocasionar esto una reducción de la violencia.

A pesar del envío de diversos cuerpos policíacos, que tienen como función única el retorno de la paz, no se ha logrado, quizá lo hagan posible representantes de la iglesia católica por la elevada calidad, de quienes difunden esa religión la que profesa la mayor parte de la población.

Como es de sobra conocido, aquí actúan, los grupos denominados Los Rojos, Guerrero Unidos y Los Ardillos. De deponer la violencia al través del llamado que les hace la iglesia católica, se podría retornar a los días felices del pasado. Si el llamado al diálogo es aceptado, retornarían los tiempos de tranquilidad ahora añorados.

En Acapulco lugar en donde estuvo, para dar el inicio de una película de factura nacional, el gobernador Héctor Astudillo Flores al requerirle su opinión, en el sentido que la iglesia católica está dispuesta a participar, en un diálogo con delincuentes buscando acabar con la criminalidad existente, expresó no estar dispuesto hablar con ellos, porque el estado tiene capacidad de devolverle al pueblo la paz requerida.