* Yamilet Abarca Pineda declaró ante la PGR que el exacalde decía por teléfono que no atacaran a nadie y que actuaran con cautela

 

MÉXICO, DF.— José Luis Abarca Velázquez, exacalde de Iguala, siempre estuvo al tanto de la agresión que policías bajo su mando cometieron en contra de estudiantes de Ayotzinapa, el 26 y 27 de septiembre de 2014.
Las declaraciones que diversas personas hicieron en torno a los hechos revelan, incluso que fue él mismo quien dio a la orden de atacar a los normalistas, pues tenía la idea de que su presencia en Iguala era para sabotear el informe que su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa, daba como presidenta del DIF.
Una de las declaraciones que implican al exedil es el de su propia hija, Yamilet Abarca Pineda, quien en su declaración narró paso a pasado cómo la familia Abarca Pineda pasó aquel 26 de septiembre.
Señaló que luego del informe de su mamá, María de los Ángeles Pineda Villa, acordaron en familia ir a comer tacos. Estando en la taquería, agregó, José Luis Abarca comenzó a hacer y recibir muchas llamadas. Entonces eran poco antes de las 11 de la noche.
“En el transcurso de la cena me percaté que personas que se encontraban en el evento del informe de mi mamá le marcaron a su celular a mi papá y le comentaron que en el centro de Iguala estaban personas encapuchadas con palos, haciendo disturbios.
Mi papá comenzó a realizar diversas llamadas sin saber con quién.
Escuchaba que decía que no atacaran a nadie y que actuaran con cautela”, dijo la joven en su declaración rendida ante la PGR. (Con información de El Financiero)