* Golpe a la PGR
* Mundial de futbol y cierre de campaña

Isaías Alanís

El caso Ayotzinapa ha dado un vuelco inusitado. Le cayó cómo erupción de volcán al gobierno en estos tiempos electorales de polarización, operaciones de odio, gastos exorbitantes de campaña, decrecimiento de la oferta política dado que a la partidocracia de plano le salió el tiro por la culata y se alisan los caminos a perder o se comienza a sacar del baúl del autoritarismo medidas drásticas que en nada le convienen al país. Como lo expresan los políticos, “si me va bien a mí, le va bien a México”, argumento falaz que siempre tienen a flor de lengua.
Entre otras nimiedades demoscópicas el reculamiento de los encuestadores al anunciar con versos de reggaetón y narcocorrido que “los resultados de las encuetas, no corresponden al voto de los sufragantes”, y cierran un capítulo más de la serie de Netflix, “La tiranía de las encuestas”, patrocinada por un cártel que gracias a los medios nacionales se mantiene en el anonimato.
En medio de estas señales el algoritmo mexicano da de tumbos con lo acontecido en el caso Ayotzinapa
Las cenizas de ese crimen de lesa humanidad chamuscó al aparato de justicia mexicana, que ante los ojos del mundo, es un fracaso.
El Tribunal Federal Colegiado con sede en Tamaulipas, ordenó a la PGR, “reponer el procedimiento por el caso Ayotzinapa y crear una comisión de investigación para la verdad y la justicia, al concluir que la indagatoria “no fue pronta, efectiva, independiente ni imparcial”.
La verdad histórica del quemadero de cuerpos en el basurero de Cocula y el mito fabricado de las cenizas arrojadas al río San Juan, ¿Ya se esfumó?
El tribunal colegiado determinó que; “hay indicios suficientes para presumir que las confesiones e imputaciones en su contra fueron obtenidas mediante tortura”.
Según este tribunal; “no se aprecia que se hayan explorado las líneas de investigación que apuntaban a la participación de personal del Ejército Mexicano y la Policía Federal, y tampoco aparece que se hayan investigado los actos de tortura, y no se ha indagado al personal a quien se atribuyen tales actos, entre ellos a los integrantes de la Secretaría de Marina”. (La Jornada/6/junio/18).
Los magistrados Juan Antonio Trejo Espinoza, Héctor Gálvez y Mauricio Fernández de la Mora, a su juicio “las indagatorias del caso, dirigidas por la PGR, son irregulares y no han cumplido con los requerimientos de prontitud, efectividad, independencia e imparcialidad, como lo exige la jurisprudencia de los protocolos de la Organización de las Naciones Unidas y la Corte Interamericana de Derechos Humanos”.
Y señalan la necesidad de crear una comisión que goce de recursos para orientar nuevamente el caso.
¿A dónde conduce esta trama que le costó la vida a estudiantes guerrerenses y puso en jaque al gobierno mexicano?
La nueva comisión ¿servirá para llegar a la verdad y los culpables serán juzgados y los cuerpos de los jóvenes entregados a sus deudos?
La decisión inusitada, ha parado de cabeza a la justicia mexicana.
¿Cuál será la reacción de los deudos por la posible liberación de quiénes se supone fueron los ajusticiadores?
La desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa es uno de los casos más sonados de la historia contemporánea de México. Habrá que esperar el curso de las nuevas indagatorias con la participación de organizaciones extranjeras, de los derechos humanos y pese a lo ficticio o real de las triangulaciones con la delincuencia, y cubierto este crimen de medias mentiras y verdades a medias, es urgente que se llegue a la verdad. Una republica no puede sostenerse en pie sobre un volcán en erupción de mentiras y montajes.

CIERRE DE CAMPAÑA

Para que la cuña apriete debe ser del mismo palo o de otro asegún reza el refranero popular. El Jede de Gobierno de la CDMEX José Ramón Amieva, le hizo fuchi a Morena al no autorizar el uso de la plancha de la Plaza de la Constitución para el cierre de campaña. El pretexto cascarero, es que “debido a la infraestructura que está siendo montada para la transmisión de algunos partidos del Mundial 2018”. (El Universal/6/junio/18).
La respuesta del líder de Morena fue en automático acusando de autoritarismo al gobierno de la CDMEX todavía en manos del pálido y desdibujado Miguel Ángel Mancera que se quedó como el perro de las dos tortas al no apuntar hacia ningún cargo de alto nivel por su soberbia, fragilidad y no compromiso ni con el partido que lo llevo a la CDMEX, el PRD, ni con los arreglos en lo oscurito para doblar al abanderado de Morena.
Y como se trata de estar a la altura de la patología futbolera mundial, los de Morena decidieron realizar su cierre de campaña el próximo 27 de junio en el Estadio Azteca, propiedad de Televisa y mostrar pantorrillas firmes con toquecitos, fintas, pases a gol y por lo menos cien mil seres humanos que presenciaran un festival cultural en el coloso de Santa Úrsula.
Futbol y política se funden. Unos para cerrarle vías simbólicas al candidato hasta ahora -gracias al reculamiento de las encuestadoras- todavía puntero en los cartones que de aquí al 1 de julio, no podrá ser legalmente rebasado, salvo que los partidos opositores montaran un mega operativo y alinear el voto de todos sus militantes y seguidores en un solo candidato que podría ser Pepe Meade o Ricky Anaya, durante el momento de la votación se complicaría, no solo por el inmenso equipo de ayudantes personales y millones de pesos que esta maniobra necesitaría, sino por la flagrante violación a las leyes electorales mexicanas.
En el contexto de las próximas elecciones, el campeonato mundial de Rusia, futbol y política se juntan y muy pronto se sabrá si la selección mexicana llega a cuartos de final y MORENA alcanza la silla presidencial, con la anuencia del voto popular y el berrinche pasajero de los empresarios mexicanos. ¿Quién ganará, el voto libre, o los goles por pena máxima?