* La teoría del triángulo

 

A Ernesto Che Guevara

 

Isaías Alanís

 

Haber recorrido el domingo pasado el sur de la CdMx y constatar lo que no dicen los medios, el gobierno federal y de la CdMx sobre el brutal impacto del terremoto del pasado S19, es una verdadera canallada. Los mexicanos estamos urgidos de transparentar la verdad, si ni siquiera eso tenemos, que clase de nación tenemos, una nación sostenida en vilo por mentiras y medias tintas llevadas a extremos absurdos y miserables, como el caso de Frida Sofía, los muertos de Nochixtlan, San Fernando, los 43 estudiantes y una lista interminable de ficciones con las que se ha construido un edificio de cartón sumergido en la corrupción, complicidad y que ha creado un desorden nacional con el agregado de la violencia. La pus no solo es la que brota del PAN, los miembros que hay que amputar es donde está sostenida la partidocracia a la mexicana.

En esta misma línea del tiempo está el santo grial del cambio de estafeta en la Presidencia de la nación. En otra Mirada hice alusión a las aristas sentimentaloides del bolero nacional mediante un “Triángulo” y así como se han desencadenado los últimos sucesos de la enlodada política mexicana previo al 2018, todo se podría resumir en un triángulo; “polígono de tres lados que da origen a tres vértices y tres ángulos internos. Los triángulos se clasifican en equilátero, donde los tres lados son iguales; en isósceles, dos lados iguales y uno desigual, y en escaleno, donde los tres lados son desiguales, y su característica es que la suma de sus tres ángulos siempre es igual a 180°.

Reducida esta definición sintética sobre el triángulo, en la política mexicana previo al desmantelamiento estructural, mediático, político económico y de la suma de fuerzas y partidos políticos contra el líder de Morena, orquestada desde Los Pinos con la participación de algunos lideres empresariales, partidos políticos, exgobernadores, líderes religiosos y actores de reparto mal llamados candidatos independientes, el triángulo se abre a tres segmentos. Con la renuncia de Margarita Zavala Gómez del Campo el gobierno tiene una salida con otros tres actores de reparto, ella misma, Jaime Rodríguez “El Bronco” y el gatito al servicio de Luis Videgaray, Armando Ríos Piter.

La renuncia de Álvarez Icaza a participar como “independiente” es obvia si la calibramos desde sus aspiraciones personales, ligado por tradición al petameti purépecha, Cuauhtémoc Cárdenas, Icaza le hace el juego a la izquierda humanitaria, y María de Jesús Patricio Martínez, postulada por el Congreso Nacional Indígena, es un parte aguas para el México mestizo y la única que cuenta con una estructura programática.

El plan “A” del gobierno con la intromisión en la física electoral de un triángulo, es vaporizar el voto que podría engordar las arcas de Morena, y que tanto Margarita como los “independientes” una vez cumplida la misión de quebrantar el voto su tarea sea hacer ganar al PRI.

Y en este triángulo equilátero que “tiene tres lados iguales”, lo más viable para el estado es posicionar a Margarita como una candidata con fuerza, ya que Felipe le abrió las puertas de Los Pinos en 2006 a EPN.

En el torcido vértice tricolor han salido señales mistéricas sobre los escombros del partido que apuntan a José Antonio Meade Kuribreña. ¿Una vez hecha la apuesta sobre millones de dólares que se invertirán en la campaña, se podría dar otra transición de terciopelo y la deshojada Margarita por 120 mil muertos sería presidenta de México con el concierto de empresarios, medios, y los políticos del tricolor que aspiran a retener con el Frente Amplio la cámaras y desde ahí mantener la misma línea económica, política y social sobre las ruinas de México? No hay que pasar por alto que EPN llega herido y sin poder real a la recta final de su sexenio. Por eso el presidente le apunta al Frente Ciudadano por México, probablemente con Anaya como candidato u otro. Y el ruido mediático que harían los “independientes”.

Como en el caso de Margarita Zavala, quien nunca ha participado en una elección y desde Los Pinos, donde cogobernó con el marido fue considerada una mujer dura, que reñía con el esposo cuando este agarraba la jarra, y lo desoyó cuando ella apoyó a Madero para ser el presidente del blanquiazul, y ahora bajo el ala pinolera el PAN de Calderón y Margarita quedó “en medio de un triángulo. “Comprometió su corazón y nunca pensó/que perteneciendo a otro”, puso sus ojos en la candidatura independiente montado como un show mediático que no tienen los otros “independientes”. De lo que se trata no es de abrir el abanico a un tripartidismo invisible, si no cerrarle las puertas al morenismo que avanza a pasos gigantes, pese al despilfarro grotesco de un Moreno Valle, de la propia Margarita que ahora como “independiente”. ¿De dónde saldrán los recursos para movilizarse por todo el país?

Calderón cuenta con algunos gobernadores panistas leales, pero la estructura del PAN la tiene Anaya y los recursos.
La aventura teatral de Margarita y los “independientes” no es un avance democrático, al contrario son las piezas que se habrán de mover para frenar cualquier intento por romper la vieja cadena que ata a los mexicanos a un solo partido. Basta con revisar los cartones de caricaturistas mexicanos y extranjeros para darse cuenta de cómo se están moviendo las aristas del triangulo equilátero al interior de los segmentos del poder, privado y oficial.

El set de filmación montado por el aparato gubernamental incluye una larga lista de actores y extras que saldrán no solo de los tres partidos, también de informadores, editorialistas, hombres de negocios oscuros y blanqueadores que, ahora si, ya no solo pondrán la pachocha para las elecciones, algunos expertos opinan que muchos de sus alfiles podrían estar en la próxima boleta electoral en los estados donde haya relevos de alcaldes, senadores, diputados y gobernadores. Y como dice la canción: estamos “en medio de un triángulo/sin solución, ni si quiera justificación”.