* El alcalde, quien había dicho que el 19 de octubre diría donde se ubicaría el relleno sanitario de la capital, ayer declaró que trabaja en 3 opciones para resolver el problema del destino final de los desechos, incluso no descartó utilizar la celda que está en Matlalapa, municipio de Tixtla

 

Redacción

 

Recolectar casi 700 toneladas de basura que se acumularon en calles y espacios públicos de Chilpancingo desde el pasado fin de semana hasta el miércoles, representó un gasto de casi 5 millones de pesos para el gobierno del estado y el municipio, aseguró ayer el alcalde Marco Antonio Leyva Mena, quien admitió que su administración no tiene el resuelto el problema del destino final de las casi 300 toneladas de desechos que se generan en la capital.

En conferencia de prensa, el primer edil que en la semana expresó que el próximo 19 de octubre anunciaría donde estaría ubicado el terreno donde se establecería el relleno sanitario de la capital, este viernes declaró que para dar solución a largo plazo su administración trabaja en tres vertientes: habilitar un relleno con Zumpango, la posibilidad de adquirir un terreno en Chilpancingo o abrir el que fue habilitado en Metlalapa, en Tixtla, porque este último que ya cuenta con el visto bueno del alcalde Hossein Nabor Guillén.

Leyva Mena volvió a responsabilizar a personajes del Partido de la Revolución Democrática de estar detrás de la agitación que se generó en la capital del estado debido a la acumulación de basura, e incluso dijo que ayudaron a que los basureros proliferaran en la vía pública para poder pedir su renuncia con el apoyo de los diputados del PRD en el Congreso del Estado, aprovechándose de “un momento de dificultad” para crear un mayor conflicto.

Además, señaló de nueva cuenta a uno de los líderes de ‘la basura jefa’, Javier Bello, de haber llevado basura a los tiraderos que había en las calles para exigirle 19 permisos para que puedan operar más camionetas recolectoras, por lo que ya presentó la denuncia ante las autoridades correspondientes.

Sobre el sitio que llama centro de transferencia de desechos que está ubicado al norte de la ciudad, Leyva Mena dijo que el trato fue hecho por su administración con la señora Hortensia Navarrete Morán, quien no tiene ningún vínculo o parentesco con el gobernador Héctor Astudillo Flores, como lo informó la revista ‘Proceso’ el jueves pasado.

Además, dijo que el uso de ese predio no representa ningún gasto ni para el gobierno del estado ni para su administración.

También explicó que ha tenido acercamientos con el alcalde de Eduardo Neri, Pablo Higuera Fuentes, para que se pueda reabrir el relleno sanitario de El Platanal y que mediante el “reacomodo de basura” se pueda seguir utilizando hasta el mes de diciembre.

Sin embargo, el primer edil de ese municipio vecino advirtió el martes pasado que “no estoy obligado a resolver” el problema de la basura de Chilpancingo, y precisó que permitir que utilizarán el basurero de El Platanal,  solamente fue un proyecto para cerrarlo, “nosotros necesitábamos eso”, por lo que sugirió a Leyva Mena que “cada quien que asuma su responsabilidad y busque la solución a este problema de la basura”.

Cuando fue cuestionado sobre los supuestos adeudos que se tienen con la empresa que trabaja en el tratamiento de la basura en El Platanal, lo que habría ocasionado que dejaran de trabajar, el alcalde capitalino aseguró que ya se pagaron los gastos por un monto de 12 millones de pesos, de los cuales 5 millones se destinaron al saneamiento y el resto a la operación.